Sergio Llull no quiere tener absolutamente ningún problema físico durante la próxima temporada. El base de Mahón regresó a final de la campaña después de ocho meses de recuperación. La lesión en verano estuvo cerca de dejarle fuera durante mucho tiempo. Las dudas sobre si volvería a ser el jugador de antes empezaron a brotar.
Los meses se hacían más largos y cada vez que el Real Madrid entraba en una pequeña crisis, los recuerdos hacia el base menorquín se colocaban en primera plana. Fue en la eliminatoria ante Panahinaikos cuando la espera puso fin. Llull volvía a tener minutos y con muy buenas sensaciones. El pabellón se ponía en pie y el líder merengue respondía a unos aficionados que le habían echado de menos.
Después de varios partidos de adaptación el mejor Llull hizo acto de presencia. No con el habitual acierto en ataque pero con el mismo alma e incluso con mejor físico. Fue clave en la Euroliga levantada e hizo lo propio durante la final de la ACB. Su labor con los fisios ha sido clave y él mismo lo ha agradecido en varias ocasiones.
Este verano la cosa es totalmente distinta, salvo la exigencia. Llull, pese a estar de vacaciones, se ha reencontrado con Trapero -que forma parte del plantel merengue- para seguir trabajando el físico y llegar la próxima temporada al mejor nivel. Sin Doncic en el equipo y con varias llegadas nuevas, el de Mahón deberá ser el de siempre para recuperar una titularidad que en los últimos meses no ha tenido.
Noticias relacionadas
- Melwin Pantzar será el tercer base del Real Madrid
- Llull inaugura un pabellón que lleva su nombre
- Llull: "¿La NBA? Mi sueño era jugar en el Madrid"
- El mensaje de Campazzo al madridismo tras su renovación
- Vídeo | Llull, el más aclamado por los madridistas en Sol
- Sergio Llull se llevó la copa de la ACB... ¡a su casa!