Los Angeles Lakers, con un gran esfuerzo de su quinteto inicial, sobrevivieron a duras penas a la reacción final de Luka Doncic y los Dallas Mavericks (114-113) en un partido que llegaron a dominar por 19 puntos en el tercer cuarto y que pudo decantar Barea con un triple en el último segundo.

LeBron James fue el mejor del duelo con 29 puntos, 5 rebotes y 6 asistencias, mientras que Doncic, que tardó en entrar en calor, concluyó con 14 tantos, 7 asistencias y 5 rebotes. El puertorriqueño José Juan Barea aportó 15 puntos y 10 asistencias.

Los Lakers, que reciben 122,3 puntos de media -la peor defensa en la historia de la franquicia-, mejoraron ese registro y lograron neutralizar al base Dennis Smith Jr. (5 puntos). Los tejanos, por su parte, han caído en los cinco partidos que han disputado esta temporada a domicilio.

El arranque dejó un gran momento: Doncic se fundió en un abrazo con James, su gran ídolo, y le dirigió una sonrisa con la que dejaba clara la admiración que le profesa. El esloveno, acusando esos nervios iniciales, no tocó aro con el primer triple que intentó y marró sus primeros seis lanzamientos a canasta.

Esas malas sensaciones contagiaron al resto del equipo, que encajó un parcial de 15-0 y se colocaron 17 puntos abajo ante un rival que lo metía absolutamente todo, con un sólido James, un Kyle Kuzma que veía la canasta como una piscina y un JaVale McGee vital en la pintura.

Reacción de los Mavs

La ventaja californiana llegó a ser de 18 tantos, pero los Mavericks, tras arrancar el duelo con un 6/24 en tiros, reaccionaron de la mano de su banquillo con un perfecto 10/10 en el que mucho tuvo que ver la gran actividad de Barea. Los de Rick Carlisle acechaban con unos inspirados Wesley Matthews y Harrison Barnes, que anotó un triple para dejar el marcador en 66-59 al descanso.

Tras el paso por vestuarios, James salió motivado, anotó dos lanzamientos exteriores consecutivos y lideró a los suyos para obtener otra renta abultada partiendo de una notable intensidad defensiva.

Doncic salió a escena

Doncic anotó su primera canasta en el minuto 32 pero no servía para evitar la mayor brecha del partido, que llegó con un triple de Lonzo Ball. Los Mavericks, no obstante, volvieron a empujar y un tiro exterior del exjugador del Real Madrid (89-78) advertía de que las espadas seguían en alto.

El pundonor de Barea y Doncic siguió dando frutos y colocó a los Mavericks a solo seis puntos a falta de dos minutos para un final digno de Halloween. La presión se mantuvo y un triple de Barnes a pase de Doncic puso el partido en un puño. Kuzma sumó un punto más desde el tiro libre y Doncic empató el duelo con una gran penetración.

Después, James erró un lanzamiento desde la personal y dejó las cosas en 114-113 a falta de 2,1 segundos. Finalmente, Barea lo intentó a la desesperada y falló.

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