Los Angeles Lakers están viviendo uno de los momentos más desconcertantes de su historia recientes. Pese a tener a LeBron James en su plantilla, van a acabar esta temporada con peor récord que el año pasado sin él. Esto ha llevado a Pelinka y a Magic Johnson a buscar una alternativa a Luke Walton para el banquillo y esa podría ser Rick Carlisle.

El actual entrenador de Luka Doncic en los Dallas Mavericks tiene una gran reputación a lo largo de la liga. A principios de los años 2000 construyó a los Pistons que se alzarían con el anillo en 2004- con Larry Brown como técnico-. Tras cuatro años muy buenos en los Indiana Pacers, llegó a Texas donde ya lleva cerca de once campañas.

El antiguo jugador de los Celtics aterrizó en el American Airlines Center en mayo de 2008 y desde entonces ha cosechado varios éxitos. Con Dirk Nowitzki todavía en sus mejores años solían superar las 50 victorias en temporada regular, pero el culmen llegó en 2011.

Cuando nadie lo esperaba, los Mavs se impusieron a toda la Conferencia Oeste- incluidos unos Lakers de Kobe y Pau en el último año de Phil Jackson como técnico- y llegaron a las Finales de la NBA. Allí se encontraron a los Miami Heat de Wade, Bosh y LeBron James. El alero defraudó en su primera ronda por el título desde 2007 y los de Cuban se hicieron con el Anillo. De esta manera completaron su venganza por lo ocurrido en 2006, cuando los de Florida salieron vencedores en seis duelos.

Carlisle es considerado dentro de la liga como uno de los mejores entrenadores en activo. A lo largo de los años ha demostrado que es capaz de amoldarse a todo tipo de plantillas, desde las más ofensivas hasta las más defensivas. En caso de que se fuera a California, Jason Kidd, leyenda de los Mavericks, podría ocupar su lugar.

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