El Real Madrid logró una victoria de mucho prestigio en el OAKA, donde un triple de Rudy Fernández sobre la bocina daba el triunfo a los blancos. Las últimas cinco derrotas de los canarios les deja en una situación muy complicada, y otro tropiezo le dejaría fuera de los puestos de playoffs. Con la mente puesta en Europa, el equipo de Txus Vidorreta debe intentar sobrevivir al Madrid. 

El conjunto blanco por su parte, quiere conseguir la victoria para alejarse del Baskonia y asegurar la segunda plaza. La vuelta de Deck está descartada, pero los demás están en total disponibilidad para el técnico vasco. No sería descabellado pensar que Randolph o Thompkins podrían tener descanso, ya que Felipe Reyes no viajó a Grecia para el último partido. 

El conjunto local lleva sin ganar al vigente campeón de la competición dos años, y tienen entre ceja y ceja cortar la mala racha y volver a asentarse en las plazas que garantizan los playoffs. 

El Madrid tiene tomada la medida

Ya son dos años sin sufrir una derrota ante el cuadro canario, y cabe recordar que en el choque de la primera vuelta anotaron todos los jugadores salvo Prepelic. Ayón fue la tortura de los visitantes con 8 puntos y 17 rebotes. La última victoria del Tenerife en casa ante el Madrid fue por 75-64. Se podría afirmar que Pablo Laso tiene tomada la media del equipo dirigido por Vidorreta.

Abromaitis e Iverson, las grandes amenazas

Los dos jugadores americanos son los más peligrosos de su equipo en lo que a anotación se refiere. Ambos fueron los mejores en su último partido y tienen la espina clavada de su mal actuación en la primera vuelta, donde acabaron con solo cinco puntos cada uno. 

Tendrán que pelear con los mejores defensores del Madrid, que poco a poco están encontrando la fórmula y mantienen a raya a los grandes ataques de la competición. Un partido entre dos equipos que se podrían volver a ver la cara en los cruces, como ya ocurrió la temporada pasada.

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