Luka Doncic 'ha regresado' al Real Madrid y lo ha hecho de una forma muy especial. Consciente de la importancia del partido que afronta este miércoles el conjunto de Pablo Laso, el actual jugador de los Dallas Mavericks se ha querido acercar a la capital española a presenciar el duelo contra el Panathinaikos. Además, su presencia no ha pasado desapercibida, pues ha sido galardonado con una réplica de la Euroliga del año pasado, la cual conquistó vestido de blanco.

De esta manera, el feudo madridista ha demostrado no olvidarse de su joya, pues Doncic siempre ha sido muy querido por la afición merengue, y sus brillantes actuaciones vestido de blanco le respaldan aun más. Además, ha sido una pieza clave en los recientes éxitos del Real Madrid con Pablo Laso al mando, lo cual sumado a su juventud, ha servido para asombrar al mundo con su indiscutible potencial.

No obstante, tras unos años gloriosos en las filas del Real Madrid, Doncic decidió ampliar horizontes en sus aventuras y poner rumbo a la NBA. Una vez allí, fueron los Dallas Mavericks los que recibieron al esloveno con los brazos abiertos, donde tampoco ha tardado en cuajar y en hacerse con los galones de estrella. Luka asombra al mundo allá por donde va y la expectación es máxima cada vez que él entra en juego.

El camino hacia la leyenda

En su palmarés vestido de blanco, el esloveno tampoco se queda atrás. Carga en sus espaldas con una Euroliga, una Intercontinental, tres Ligas, dos Copas del Rey, tres MVP este curso -en la Final Four, la Euroliga y la Liga Regular- y dos veces elegido como el mejor joven de la Euroliga. Así las cosas, Luka siempre tendrá las puertas abiertas a un posible regreso al Real Madrid, pero este es su primer año en la NBA y la mejor de las suertes le está por llegar.

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