El FC Barcelona llegaba sin Mirotic y el Real Madrid sin Carroll ni Causeur. Este segundo por la Covid-19, al igual que el hispano-montenegrino, que intentó hasta el final estar presente pero que como consecuencia del protocolo de la Euroliga tuvo que apoyar a los suyos desde la grada. [Narración y estadísticas: FC Barcelona 79-72 Real Madrid]

Laso sorprendía y daba la titularidad a Alocén, mientras que el Barça abría el marcador con un alley-oop de Smits. Empezaba el espectáculo que rápidamente decantaría la balanza para el conjunto catalán. El duelo comenzó rápido, con los de Jasikevicius agotando poco tiempo de posesión, pero acertando, y el Real Madrid algo blando en defensa.

Abrines se enchufaba y replicaba a Alocén. Y el Barça, aprovechando los errores merengues en la zona ofensiva, se colocaba con un 12-9 y mejores sensaciones. Ninguno terminaba de arrancar, pero los culés eran ligeramente superiores. Los de Laso aguantaban y sacaban petróleo de la pelea del rebote para ajustar el marcador. Abalde, con un triple, clavaba el empate a 14. Por unos instantes el Madrid se gustaba.

Sin embargo, la defensa local era mucho mejor. Tavares, además, estaba completamente descolocado. Imposible encontrarle en la pintura gracias a la presión culé. 18-14 que se quedaría en nada viendo lo que se desencadenó en el segundo cuarto.

Fue el momento de Kuric. El Barça sí tenía a su tirador estrella y este no se cortó lo más mínimo. Rápidamente se iban al 23-16 gracias a su acierto en el perímetro y, pese a los intentos de Llull por imprimir algo de velocidad al juego, era Heurtel el que desde media distancia castigaba de nuevo. Rudy recortó con uno de sus triples y tras un gran movimiento de balón. Sin embargo, Kuric reapareció y llevó en volandas a los de Jasikevicius con un 29-21. Era la primera vez que los culés rompían seriamente.

La desesperación se hacía con Campazzo, que tras una técnica se cargaba con tres faltas. Y, para colmo, Brandon Davies se hizo con el partido. Duro en defensa y versátil en ataque, destrozó la táctica merengue. El Barça se marchaba hasta el 32-21 y el Madrid se cargaba de faltas a mitad de cuarto.

Era el momento del acelerón blaugrana. Huertel acertaba, Tavares estaba anulado y Calathes seguía castigando con un +16. Laso lo intentaba frenar metiendo a Randolph, pero era imposible. Smits hizo de las suyas con un triple y Higgins hurgó en la herida para el 48-27.

El tercer cuarto del Real Madrid fue otro partido. Era otro Real Madrid. El de siempre. Frenó la anotación del Barça y en los primeros cinco minutos apenas se sumó. El 54-33 lo decía todo. Deck, además, abandonaba el encuentro por lesión. El cuadro blanco perdía a uno de sus almas en defensa. Pese a ello Taylor se desató y lideró uno de los mejores momentos de los de Laso. 54-39 y Sarunas pedía tiempo muerto.

La respuesta de los suyos fue buena. Abrines enchufaba el triple y mantenía las distancias. Pero el Real Madrid quería apretar. Mejores defensas y, por fin, el ataque encontraba algo de acierto. Campazzo y Thompkins tomaron el mando y el 60-50 pintó otro encuentro completamente diferente. Kuric salvaba los muebles y el Madrid se iba al desenlace con un 64-52 que decía mucho.

El milagro no llega

El Real Madrid lo intentó, pero no pudo. La desastrosa primera mitad fue lo suficientemente mala como para hacer imposible la remontada final. Los de Laso lo intentaron y llegaron con opciones al final del partido. Apenas seis puntos de distancia con más de un minuto por delante. Pero Sergi Martínez y algún que otro acierto blaugrana frenó a los blancos (79-72).

El canterano se dio a conocer en Europa y cumplió con la confianza que le viene dando Jasikevicius en las últimas jornadas. Sergi anotó el triple que ponía el 67-56 y que frenaba las intentonas merengues. Fue clave para que el Real Madrid bajara el pistón durante algunos minutos, haciendo imposible el vuelco al marcador. Más todavía tras el 2+1 de Higgins a falta de algo más de cinco minutos.

Laso lo paró con un tiempo muerto y buscó soluciones. Thompkins tenía que reaparecer y el acierto de Llull también se echaba en falta. El balear sacó a pasear sus tradicionales 'mandarinas' y el Madrid apretó en defensa con una posición zonal hasta el 72-63 que, gracias al base, pasaría a ser un 74-67. Faltaba tiempo y el recuerdo de la primera parte llegaba a las mentes visitantes. Sergi Martínez puso la puntilla con un 77-79 y el Madrid dijo adiós a El Clásico para colocarse con un mal 1-4 en Euroliga.

Barça 79-72 Real Madrid

Barça: Hanga (4), Higgins (13), Abrines (8), Smits (7), Davies (14) -cinco inicial-, Heurtel (6), Oriola (2), Martínez (7), Kuric (15) y Calathes (3).

Real Madrid (14+13+25+20): Alocen (3), Abalde (13), Taylor (6), Thompkins (14), Tavares (6) - cinco incial-, Randolph (1), Rudy (3), Campazzo (7), Deck (2), Garuba (8) y Llull (9).

Parciales: 18-14 | 30-13 | 16-25 | 15-20

Árbitros: Christos Christodoulou, Mehdi Difallah y Milan Nedovic.

Incidencias: partido de la quinta jornada de la Euroliga disputado sin público en el Palau Blaugrana