El Real Madrid no sufrió y venció con comodidad al Girona (74-93) en un encuentro en el que los de Chus Mateo volvieron a mostrar el gran nivel que llevan ofreciendo todo el curso. Ante los gerundenses se jugaban el liderato de la Liga Endesa y dejaron clara su superioridad desde el principio.
De nuevo, como ante el Baskonia, el Real Madrid volvió a marcar la diferencia desde la línea del triple. Yabusele estuvo de nuevo inspirado con su tiro exterior y sus triples y los de sus compañeros facilitaron las cosas de los blancos ante un Girona muy poco productivo en ataque, especialmente en la primera mitad.
El conjunto blanco entró al partido consciente de que enfrente tenía a un rival complicado que había ganado todos sus partidos. Los de Chus Mateo, liderados por un gran Yabusele que anotó los cinco primeros puntos de su equipo, frenaron un arranque frenético de su rival.
Del 4-0 inicial se pasó a un 5-10 en favor del Real Madrid que se mostró muy fiable en el juego ofensivo. El jovencísimo Ismaile Diagne volvió a ser titular al igual que contra el Barça y firmó unos buenos primeros compases con cuatro puntos y tres rebotes. Mientras tanto, el Girona no quiso dejar marchar a los blancos en el marcador y consiguieron reducir una desventaja de siete puntos. Sin embargo, Iroegbu, el mejor de los gerundenses no pudo evitar que su equipo se marchara perdiendo al término del primer cuarto. Un excepcional triple de Ndiaye dejó en seis tantos la ventaja madridista.
El segundo cuarto no tuvo color. El Real Madrid puso la directa y dejó el partido prácticamente visto para sentencia. Lo cerró con un parcial de 11-22 gracias a un gran trabajo defensivo y al poco acierto del Girona en el lanzamiento.
Los de Chus Mateo firmaron un segundo envite coral. Cada uno aportó lo suyo, pero la diferencia estuvo en el lanzamiento desde la línea de tres. Al igual que frente al Baskonia en el partido de Euroliga, los blancos hicieron mucho daño desde el triple y cinco aciertos en el segundo cuarto contra los catalanes les permitieron marcharse trece arriba al descanso.
La sentencia
El Girona debía reaccionar en la segunda mitad si quería asaltar el liderato de la Liga Endesa y continuar con su imbatibilidad. Sin embargo, volvió a toparse en el tercer cuarto con un Real Madrid dominador en la faceta defensiva y con un Yabusele que seguía anotando puntos en busca de convertirse en el máximo anotador del partido.
Los blancos comenzaron el segundo tiempo con dos triples que dejaron una ventaja de 21 puntos que dinamitó cualquier opción de reacción de su rival. A partir de ahí la renta no paró de aumentar gracias a unos buenos minutos de Musa y Poirier.
El choque no tuvo más historia. El Girona no logró resucitar el partido y sucumbió ante un Real Madrid superior. Musa, con 14 puntos, fue el máximo anotador de los blancos, pero no lo fue del partido. Iroegbu, del Girona, cerró su participación con 17 puntos.
Con este triunfo, el Real Madrid sigue con su camino inmaculado esta temporada. Ha ganado los siete partidos que ha disputado y está mostrando un nivel que permite soñar con cosas grandes.