Este no era un partido más. Cualquier año un choque entre el Real Madrid y el Bayern de Múnich en el WiZink Center podría haber sido algo cotidiano de la Euroliga, pero esta temporada muchos esperaban este enfrentamiento por el poder que tenía una de las figuras del conjunto bávaro. [Así vivimos la victoria del Real Madrid ante el Bayern]
Pablo Laso regresó a la que fue su casa durante más de una década para sentarse en el banquillo visitante. Sobraban las presentaciones, así que tuvo su momento de gloria, con cerca de 2 minutos de ovación cerrada y atronadora por parte del Palacio de los Deportes mientras al entrenador casi se le saltaban las lágrimas. No era para menos, era una forma elegante de reconocer la trayectoria de uno de los mejores entrenadores de la historia del Real Madrid.
De la emoción a la competición, el Real Madrid entró al partido como un ciclón con un 8-0 de parcial que provocó el primer cabreo de Pablo Laso como visitante. Sin embargo, los germanos supieron encontrar la forma de darle la vuelta a la situación y consiguieron cerrar el primer cuarto por delante pese a la gran cantidad de rebotes que cazó Ndiaye para los blancos.
En el segundo parcial los de Pablo Laso apretaron las tuercas en defensa y consiguieron cerrar el grifo del Bayern. Llull acudió al rescate y los blancos volvieron a tomar ventaja en el marcador, aunque la renta al descanso fue de tan sólo 5 puntos.
Tras el intercambio de golpes en el tercer cuarto, todo quedó abierto para los últimos 10 minutos, pero ahí fue donde se cayó el Bayern y donde el Real Madrid dio el do de pecho. El parcial de 9-2 obligó a Laso a parar el partido, pero para entonces ya no había remedio así que la victoria, una más, se quedó de nuevo en el WiZink Center.
La batalla de inicio
Después del precioso momento que se vivió con el recibimiento a Pablo Laso se abrió camino el baloncesto. El 8-0 inicial fue un mensaje contundente de los de Chus Mateo, que no querían dejar pasar ni una y que iban lanzados a por la decimotercera victoria de la temporada en Europa. Sin embargo, el Bayern tuvo capacidad de reacción, especialmente con los 5 puntos de Bonga que sirvieron de trampolín para su equipo.
Menos fluido en el pase que de costumbre, al anfitrión no le quedó más remedio que atacar el aro. Y ahí se topó de bruces con otro exmadridista, Serge Ibaka, quien con tres tapones lideró la fortaleza. En ese contexto el Real Madrid se fue al final del primer acto con unos inusuales porcentajes de acierto en los lanzamientos de dos (8 de 22). No fueron mejores los del Bayern, pero su mayor facilidad para el triple decantó la balanza (19-23, min.10).
En el segundo acto jugadores que en su día fueron buques insignia de Laso en el Madrid y que lo siguen siendo de Mateo todavía como El Chacho y Llull, se echaron al equipo a su espalda. Los blancos lograron darle la vuelta a un marcador que se había puesto cuesta arriba y se marcharon al descanso con una ventaja de 5 puntos (42-37).
El Real Madrid quería matar el partido cuanto antes y con las actuaciones eléctricas de Campazzo y de Hezonja logró ponerse 12 puntos arriba, aunque el Bayern aplacó los ánimos gracias a los puntos de Edwards y de Booker, así que el choque llegó vivo al último cuarto con Pablo Laso pensando en cómo dar la campanada.
Sin embargo, ahí el Bayern se hundió y el Real Madrid mató a un rival que estaba ya casi fundido. El 14-2 de parcial dejó todo visto para sentencia y los últimos minutos fueron un oasis para los blancos, que con tan sólo dejarse llevar firmaron una nueva victoria que les mantiene como líderes contundentes de la Euroliga.
Real Madrid 88 - 73 Bayern de Múnich
Real Madrid: Campazzo (13), Causeur (6), Musa (4), Ndiaye (-), Tavares (8), -cinco inicial-, Rudy Fernández (-), Sergio Rodríguez (11), Poirier (11), Deck (7), Llull (16) y Hezonja (12).
Bayern Múnich: Edwards (11), Bolmaro (6), Bonga (15), Booker (14), Ibaka (6) -equipo inicial-, Francisco (11), Brankovic (4), Giffey (-), Weiler-Babb (6).
Parciales: 19-23, 23-14, 21-20, 25-17.
Árbitros: Milan Nedovic (Eslovenia), Luka Kardum (Croacia) y Adar Peer (Israel). Expulsaron por cinco faltas a Booker (min.39)
Incidencias: partido de la jornada 14 de la Euroliga de baloncesto disputado en el WiZink Center de Madrid ante unos 10.000 espectadores.