Manu Hernando tuvo que ser sustituido en el partido del pasado domingo ante la UD Almería y se han confirmado los peores presagios. El jugador cedido por el Real Madrid en la Ponferradina sufre una rotura completa de ligamento lateral interno de su rodilla derecha. Por esta cuestión tendrá que pasar por el quirófano y se estima que, como mínimo, estará tres meses fuera; podría decir adiós a la temporada. Más problemas físicos para el central que vivió un 2020 en el que también sufrió.

Una lesión muscular en el recto interno de su pierna izquierda en el regreso de la competición tras el parón por el coronavirus le hizo no poder volver a jugar con la camiseta del Racing de Santander, equipo en el que estaba cedido la temporada pasada. Con este nuevo problema físico, Hernando, que era un fijo de la selección española sub21, y se perderá al menos la primera parte de la Eurocopa. Luis de la Fuente tendrá que buscar alternativas.

En la temporada 2017/2018 llegó a la plantilla del Real Madrid Castilla estrenándose en Segunda División B disputando 23 partidos. Ese mismo año llegó a participar en los entrenamientos del primer equipo e incluso disputó partidos en pretemporada en la gira de amistosos de 2017. Hernando inició su carrera en el Club Internacional de la Amistad en Palencia, antes de llegar a las categorías inferiores del club blanco. Fue internacional también en otras categorías inferiores de la Selección.

El canterano del Real Madrid lo pasó realmente mal entre esa temporada y la 2018/2019, ya que estuvo alejado de los terrenos de juego por una lesión que le impidió hacer lo que más le apasiona durante seis meses. Tiene contrato hasta el verano de 2022, por lo que aún le queda otra temporada para demostrar que tiene nivel de primera división. Esta lesión puede lastrar notablemente su progresión. Una vez pase por el quirófano, habrá que ver cuál es el alcance final.

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