El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, ha acudido en la mañana de este martes a la presentación de la iniciativa 'Sin respeto no hay juego' del Grupo PRISA. Allí ha tomado la palabra para asegurar que los representantes de los equipos "son los que en un primer momento tienen que cultivar la cultura de la concordia" entre los seguidores y sobre todo "ser implacables con quienes no acepten el código sagrado de la tolerancia". También ha querido resaltar que "es imprescindible que el fútbol esté unido" y que todos los que lo forman adopten una posición "firme y rotunda".
En este sentido, el máximo dirigente madridista aseguró que "todos los que forman parte de este deporte" comparten la misma respuesta, que es la de "rechazo total y absoluto a los que insultan y arrojan objetos al campo".
En el fútbol no hay espacio para los radicales y los intransigentes.
Centrándose en su club quiso remarcar que "en el Real Madrid no hay lugar para los violentos". La lucha contra estas personas es una "labor compleja que requiere de estudio, planificación y acción", además de "una voluntad inquebrantable". Posteriormente, recordó "la profunda transformación" que el Madrid ha realizado de la Grada de Animación del Santiago Bernabéu, "donde ahora no tienen cabida los menosprecios o los insultos”
Para finalizar, el máximo mandatario del club blanco habló de la importancia del fútbol y su pertenencia "a la gente, a todos los pueblos", por lo que "su legado debe servir para unir" aprovechándose del momento crucial que atraviesa "la historia del fútbol y que nunca fue tan fuerte". el cual debe aprovecharse para "hacer fuerza para expulsar a los violentos y los intolerantes". Concluyó, asegurando que "es algo más que un partido que debemos ganar, se lo debemos a los aficionados de mundo y al propio fútbol".