La pasada temporada la Copa del Rey le duró un partido al Real Madrid a causa del 'caso Cheryshev'. El conjunto merengue fue descalificado de la competición por alineación indebida, ya que el ruso arrastraba una sanción de la campaña 2014/2015 cuando militaba en las filas del Villarreal. Pues bien, los blancos parecen haber aprendido la lección y han andado muy cautos con la situación de Álvaro Tejero de cara al choque de vuelta copero frente al Celta de Vigo en Balaidos.
El canterano blanco, que puede adaptarse a cualquiera de los dos flancos de la defensa, tenía muchas probabilidades de entrar en la convocatoria de Zinedine Zidane contra los vigueses a causa de las numerosas bajas en los laterales. Sin embargo, el futbolista fue expulsado con el Castilla en el último enfrentamiento contra el Amorebieta.
El acta arbitral refleja que fue expulsado "por escupir a un adversario en la cara una vez finalizado el encuentro, todavía sobre el terreno de juego". El artículo 56.3 del Código Disciplinario de la Federación explica que cuando se trata de jugadores del filial "el futbolista sancionado no podrá intervenir (…) hasta que transcurra, en la categoría en la que se cometió dicha infracción, el número de jornadas a que haga méritos la sanción". Pese a que el Comité de Competición aun no se ha pronunciado -lo hará el miércoles-, el equipo madridista ha preferido prevenir antes que curar y actuar de forma conservadora, como señala Okdiario.
Tejero había sido llamado para formar parte del entrenamiento de la primera plantilla, lo que demuestra que Zizou lo tenía en mente para el choque del próximo miércoles. De esta forma, el técnico francés pierde una de las alternativas que tenía para solucionar la ausencia segura de Marcelo y Carvajal y la duda de Danilo a causa de sus molestias.