Las declaraciones de Fernando Roig haciendo referencia a las bolsas del Real Madrid con la que los árbitros salieron del Estadio de la Cerámica han levantado polémica. Florentino Pérez consideró totalmente fuera de lugar las palabras del máximo dirigente del Villarreal intentando así crear una duda en la opinión pública con unos obsequios habituales al arbitraje -bolígrafos, pins y llaveros, entre otras cosas de poco valor-.
Las intenciones que intentó vender Roig ante los micrófonos han despertado el interés del club azulgrana y su intento de seguir alimentando este absurdo tema. Josep Vives, portavoz del Barcelona, ha querido seguir metiendo el dedo en la llaga afirmando que el club culé no da obsequios a los árbitros cuando van como visitantes, solamente como locales.
Sin embargo, luego intentó rectificar cuando se le preguntó si ese mensaje era para el Real Madrid, a lo que el catalán añadía que "no entramos a valorar lo que haga otro equipo". Una vez más, aprovechando cualquier detalle del club merengue para hacer leña del árbol caído.