El conjunto de Sarri se recuperó de sus dos últimas derrotas gracias a la actuación de Mertens. Un doblete del delantero que derribó a la Roma, que enlazaba nada menos que doce victorias en la competición doméstica esta temporada. El próximo rival del Real Madrid en la Champions recuperó las buenas sensaciones días antes de la eliminatoria de octavos de final.
El dominio visitante solo se vio apurado en el tramo final, con el 1-2, obra de Kevin Strootman en el minuto 88. El derechazo de Diego Perotti, tropezado en el cuerpo de Kalidou Koulibaly, obligó a un máximo esfuerzo al portero. Aunque no todo fueron buenas noticias para el Nápoles. El protagonista del partido tuvo que marcharse debido a una lesión con un problema muscular que podría truncar su presencia de cara al partido contra el Madrid.
Las victorias en la tarde del sábado han supuesto un chute de energía tanto para los de Zidane como para los de Sarri. Ambos equipos llegarán decididos a pasar a los cuartos de final y se prevé que será un encuentro de lo más discutido. San Paolo se vestirá de gala para recibir al actual líder de Europa y su victoria ante la Roma hará que el conjunto merengue -a pesar del 1-4 ante el Eibar- no baje la guardia de cara al martes, 7 de marzo.