Tras el gran partido del Madrid en Ipurúa con un equipo plagado de centrocampistas, el debate acerca de la BBC se ha abierto más que nunca. Es evidente que su presencia en el césped aporta una gran cantidad de recursos para hacer gol, pero sus detractores alegan que el equipo generaría más peligro si controlase los partidos acumulando más hombres en la medular y además concederían menos ocasiones. El partido de Eibar parece apoyar esta tesis, pero parece demasiado poco para llevar a cabo un juicio al respecto.

Lo que sí parece indudable es que, si bien los blancos son un equipo temible casi con cualquier alineación que desplieguen, con el 4-3-3 que plantea Zidane cuando alinea a Bale, Benzema y Cristiano a la vez pierden equilibrio. Es más fácil que el sistema se parta y los choques se vuelven más caóticos, pero ese caos parece no haberle ido del todo mal a un equipo que, con sus tres referentes arriba, presume de una de las delanteras más eficaces del mundo. Quizás ante equipos más exigentes que el Eibar prescindir de la BBC siga aportando mayor control del juego, pero se hace difícil imaginar que pueda mantener un ritmo goleador tan alto.

Una pregunta al respecto era inevitable en rueda de prensa, pero Zidane optó por esquivarla sutilmente. El galo se caracteriza por no mojarse demasiado en sus declaraciones, y en la previa del duelo más importante de lo que va de temporada, no era el día para romper el patrón y alimentar las polémicas.

JUGAR O NO CON LA BBC

"Cada uno puede opinar quién prefiere. Yo estoy contento de tener a toda o casi toda la plantilla disponible".