Morata volvió el pasado verano al Madrid con el objetivo de triunfar en el club que le vio crecer. Poco a poco lo está consiguiendo pese a no ser el delantero titular para Zidane. El ariete español, en apenas tres cuartos de temporada, está a tan solo dos goles de igualar su mejor registro goleador como profesional.
No le hace falta ser titular, o, mejor aún, le viene mejor no serlo. Muchos son los aficionados que quieren ver a Morata de inicio pero la realidad es que ha funcionado mucho mejor siempre que ha salido desde el banquillo.
Lleva más goles de suplente que de titular. Siete tantos saliendo desde el banquillo por los seis anotados estando desde el inicio. Es el mejor revulsivo de Zidane. Ya ha salvado al equipo en más de una ocasión com goles decisivos en los minutos finales como los que dieron la victoria al Madrid ante el Sporting de Portugal o el Villarreal.
El duelo por ser el nueve del Madrid está encendido. Sin embargo, Zizou tendrá la dura misión de elegir entre premiar a Morata con la titularidad o seguir apostando por Benzema y sacar al internacional español desde el banquillo, fórmula que ya le ha funcionado.