Pepe es el protagonista de la paradoja del Virus FIFA en el presente parón de selecciones. El central portugués se marchó arrastrando una lesión que le había privado de entrenar con el grupo y de entrar en las últimas convocatorias de Zidane.
El hecho de que se fuera con el combinado nacional no dejó indiferente a nadie, y es que resultaba extraño que no siguiera los pasos de Varane y se quedara recuperándose en Valdebebas. Sin embargo, Pepe se marchó a la concentración de la campeona de Europa y fue titular en el partido ante Hungría. Sin aparentes molestias y jugando los 90 minutos, el central madridista realizó una buena actuación en la victoria de Portugal y todo apunta a que está totalmente recuperado.
Una buena noticia para el Real Madrid, al que le espera un mes complicado donde los haya. Abril, lleno de compromisos importantísimos, se perfila como la clave para la consecución de los títulos. Zidane podrá contar, salvo imprevistos, con todos sus centrales, algo que es un bendito problema. Las rotaciones van a ser fundamentales y el hecho de que vuelvan sin complicaciones y, en el caso de Pepe, mejor de lo que se fue, es vital.