El Molinón fue testigo de una nueva victoria del Real Madrid en el campeonato doméstico (2-3). Un triunfo trabajado porque hasta en dos ocasiones tuvieron que dar la vuelta al marcador los blancos. El colegiado del encuentro, Fernández Borbalán, tuvo una tarde de lo más desafortunada al tragarse tres penaltis a favor de los de Zinedine Zidane y una expulsión que perdonó al Sporting antes del final de la primera mitad.

PENALTI SOBRE SERGIO RAMOS

La primera jugada del partido llegó con un claro penalti sobre Sergio Ramos por agarrón dentro del área. En el minuto 23, Lillo agarraba al capitán madridista para impedir que este rematase en jugada a balón parado. El colegiado andaluz no decretó pena máxima cuando el marcador reflejaba empate a uno.

PENA MÁXIMA SOBRE LUCAS VÁZQUEZ

El segundo error de bulto de Borbalán no tardó en llegar. En el ecuador de la primera parte, Meré agarraba a Lucas Vázquez dentro del área del conjunto asturiano. Un nuevo penalti que el árbitro no señaló para enfado del madridismo, ya que era la segunda pena máxima a favor del Real Madrid que se iba al limbo y todo con tablas en el marcador.

ROJA PERDONADA A LILLO POR FALTA SOBRE ASENSIO

El Sporting pudo acabar con diez el partido frente al Madrid si Fernández Borbalán hubiera visto la patada de Lillo sobre Marco Asensio en el 37. Una patada sin balón de por medio que habría supuesto la roja para el jugador. El '20' blanco mostró su enfado y se encaró con el sportinguista por la fea acción. Lillo ya había cometido un penalti sobre Ramos y más tarde, en la segunda mitad, vio amarilla por una falta sobre Morata.

MANO DE BABIN DENTRO DEL ÁREA

La nefasta tarde del colegiado andaluz culminó con otro penalti no señalado a favor del equipo merengue. Antes de que Isco hiciese el tercero para el Madrid, y el segundo tanto en su cuenta personal, hubo mano de Babin dentro del área que Borbalán no señaló al considerarla involuntaria, pese a que cortaba la trayectoria del esférico.