Marcelo se ha confesado en Globoesporte sobre cuál sería su destino deseado una vez lejos de Madrid. Su ilusión sería volver a Brasil, concretamente al Botafogo. Pese a que sus andaduras comenzaron en el Fluminense, el internacional brasileño no ha dudado en ocultar sus intenciones de jugar en un club vecino.
Llegó a Chamartín en un mercado invernal con tan solo 18 años y un futuro impensable por delante. Tras 11 años, el defensa termina contrato en 2020, pero su renovación no se hará esperar, ya que es pieza clave del equipo, y podría vestirse de blanco dos campañas más, hasta 2022. Sin embargo no duda al asegurar que "me encantaría poder jugar algún día en el Botafogo. Sería genial".
La reacción del club no se hizo esperar tras esta declaración de amor y utilizó las redes para mandarle un mensaje a Marcelo, donde incluso le reservan dorsal.
Además, este martes cumplirá 400 partidos con la entidad blanca, por lo que ha asegurado que "jamás pensé que iba a llegar a esta cifra en el Real Madrid". El brasileño también especificó que desde su llegada, el vestuario es mucho más sano.
El control de Marcelo con el balón by footbie.com