El partido de la noche del miércoles de Champions, no sólo enfrenta a Real Madrid y Atlético, enfrenta a dos formas de entender y vivir el fútbol. Zidane y Simeone han vivido el mismo proceso: de jugador a entrenador en el club que les marcó en sus carreras, pero desde sus inicios las diferencias entre ambos quedaban bastante contrastadas.
DE JUGADORES
Zidane, en el Madrid, y Simeone, en el Atleti, vieron consagradas sus aspiraciones como jugadores de fútbol. En el césped ya se veía que ambos portaban un corte de juego muy distinto. Mientras el francés era todo sutileza con el balón bajo los pies y creaba ocasiones, Simeone se dedicaba a hacer el trabajo sucio del equipo, un destructor de manual. Cuestiones estilísticas y tácticas que marcan sus guiones en los partidos.
COMO ENTRENADORES
De igual forma que sobre el césped, desde el banquillo ambos estructuran los sistemas de manera muy diferente. Zidane, que busca la unión del grupo para defender, no rechaza lanzarse al ataque en cualquier oportunidad de juego, mientras que, Simeone, plantea los partidos más defensivos, físicos y trabados. Nada tiene que ver uno y otro concepto futbolístico.
Dista también la forma de vivir los encuentros. El míster rojiblanco es energía, constantes aspavientos con los brazos y gritos desde la banda y continuas referencias a la grada para que animen. El francés, en cambio, es más sereno y sosegado. Pocas cosas perturban la paz de Zidane en el banquillo y rara vez levanta la voz salvo para dar instrucciones. Dos formas de ver y entender el fútbol, de las que el técnico blanco, sale vencedor.
Zidane: "Fracaso es no dar el máximo, saldremos a ganar" by footbie.com