El Real Madrid está desesperado. Acabar con once frente al Barcelona se ha convertido casi en misión imposible para sus jugadores. La última de ellas ha sido la más descarada de todas cuantas se han conocido. En una decisión escandalosa de De Burgos Bengoetxea, Cristiano vio la segunda tarjeta amarilla por un piscinazo que tan solo el colegiado vio.

CUATRO EXPULSIONES EN CINCO PARTIDOS

Ver la roja contra el Barça se ha convertido en una tradición. De los últimos cinco partidos oficiales, en cuatro de ellos el Real Madrid ha acabado con un jugador menos. En las últimas dos temporadas, los aficionados blancos vieron como Isco y Ramos -este en dos ocasiones- eran expulsados mientras que otras acciones de los azulgranas salían impunes.

El último Clásico es un reflejo de lo que el Real Madrid lleva viviendo durante los dos últimos años. Piscinazos como el de Suárez quedan impunes al igual que el acoso que suelen realizar los azulgranas a los colegiados, mientras que en caso de los madridistas se aprovecha la mínima ocasión para sancionarles. El miércoles se volverán a ver las caras. ¿Tendrá Zidane que lamentar una nueva expulsión?

Zidane: "Me molesta que hayan expulsado a Cristiano, espero que esté el miércoles" by footbie.com