Diego López, actual guardamenta del Espanyol, tuvo la mala suerte de sufrir un golpe que le obligó a pasar por quirófano el pasado mes de junio, una vez finalizada la temporada. El jugador completó un año brillante al frente de la portería periquita que solamente se vio frenado por la grave lesión. Un momento dulce que pasaba en Barcelona y que se vio cortado de la noche a la mañana.

Pau López cogió este verano el relevo tras la lesión de Diego. El canterano cuenta con la confianza de Quique Sánchez Flores como se ha podido ver en este inicio de temporada. Tras estar el último año cedido en el Tottenham, el técnico le ha dado la titularidad y está cumpliendo. Por esta razón, tiene todas las papeletas de ser el guardameta que salga de inicio ante el Real Madrid este domingo. Diego no ha debutado esta temporada. Ha entrado en las últimas cuatro convocatorias pero, en todas ellas, ha visto el encuentro desde el banquillo.

LA VISITA MÁS AGRIDULCE

Quique Sánchez Flores no quiere arriesgar. Diego López ya ha declarado que está listo pero la realidad es que, sin apenas rodaje, se antoja muy complicado que sea él quien juegue en el Bernabéu. Volver al coliseo blanco es siempre una cita muy especial. Madridista hasta la médula siempre dio todo por defender el escudo blanco.

El Real Madrid prepara el partido contra el Espanyol by footbie.com



 

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