Todo el madridismo se llevó las manos a la cabeza cuando Isco sufrió una durísima entrada de parte de Waston. El malagueño, con claros gestos de dolor, se revolcó por el césped de La Rosaleda ante el silencio sepulcral del público.
Tuvo que ser atendido por los servicios médicos de la Selección, pero al probarse siguió sintiendo molestias e inmediatamente pidió el cambio. Asensio sería el escogido por Lopetegui e Isco abandonó el campo ante la ovación de la que un día fue su casa. Se marchó cojeando pero haciendo gestos como tratando de indicar que solo había sido el golpe.
Ya en el banquillo se le pondría hielo en la zona del golpe pero se retiró a vestuarios minutos más tarde seguramente para hacer una primera exploración y descartar así cualquier lesión.
Isco homenajeado en Málaga en su visita con la Selección by footbie.com
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