La estancia en Barcelona no fue del todo como se preveía para el West Bromwich. Mucho menos para Jonny Evans, Gareth Barry, Jake Livermore y Boaz Myhill. Los cuatro jugadores están siendo investigados por haber robado supuestamente un taxi en la Ciudad Condal. Los futbolistas, al salir de la cena de equipo, vieron el vehículo vacío y se desplazaron con él hasta el hotel. Además de la investigación policial, el club ha abierto otra y el entrenador, Alan Pardew, se ha mostrado muy enfadado.

REPRIMENDA DEL ENTRENADOR

"Tomaremos medidas contra los implicados en el incidente del taxi. Es un hecho inaceptable, no es lo que pensábamos que podía pasar cuando viajamos. Tenemos que estar a punto para el partido ante el Southampton aunque es evidente que la coyuntura no es la ideal. Hay una investigación en curso para depurar responsabilidades y aplicaremos la disciplina con todo".

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