El Real Madrid estará en Kiev el sábado 26 de mayo. Tras vencer por 1-2 en el Allianz Arena con goles del lateral izquierdo brasileño Marcelo y el extremo izquierdo balear Marco Asensio, y empatar a dos en el estadio Santiago Bernabéu con doblete del delantero francés Karim Benzema, el conjunto blanco elimina al Bayern Múnich en semifinales y jugará su tercera final consecutiva y la cuarta en estas últimas cinco temporadas.
Pese a los abrumadores datos, los antimadridistas apelan a la suerte o a las polémicas arbitrales para justificar este éxito. Pero ha sido precisamente un exjugador del Barcelona quien ha dado una lección a todos esos fanáticos. Marc Crosas tuiteó al término del encuentro una reflexión en la que calificaba el hablar de los árbitros como "una barbaridad" y cargaba duramente contra el conjunto culé: "Si ganan cuatro Champions en cinco años en la era del mejor jugador de la historia en el Barça, a algunos se les debería caer la cara de vergüenza". Un alusión al argentino Lionel Messi, a quien muchos califican como el mejor jugador de la historia y que, sin embargo, no ha podido pasar de cuartos de final con su equipo en los últimos tres años.
Crosas nació hace treinta años en Cataluña. El centrocampistas defensivo se crió en la cantera del club blaugrana, y, tras una cesión de medio año al Olympique Lyon, tuvo que abandonar Barcelona para jugar en las filas del Celtic Glasgow escocés, el Volga ruso, el Santos Laguna mexicano -con cesión a los Leones Negros del mismo país- y al Cruz Azul, que le cedió al Tenerife y al Tampico Madero. Desde el verano de 2017 se encuentra sin equipo.
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