El Clásico, al que muchos querían poner un toque descafeinado por estar ya decidido el título liguero en favor de los blaugranas, ha dejado patente que un duelo entre Barcelona y Real Madrid siempre es de máxima tensión. Con el 1-1 en el marcador y con Hernández Hernández a punto de pitar el final de la primera mitad del partido, Sergi Roberto lanzaba el brazo en un claro gesto de agresión a Marcelo, al borde del área culé. La acción era castigada por el colegiado canario, quien no dudó en mostrar la cartulina roja al lateral del Barça. Sergi Roberto dejaba así a su equipo con diez con cuarenta y cinco minutos todavía por disputarse.

El lateral zurdo del Real Madrid se quedaba sobre el césped tendido con gestos visibles de dolor. La agresión no quedo impune y esta acción será sin duda la protagonista de las tertulias deportivas en los próximos días. Aunque no ha sido la única acción polémica del encuentro. La tensión iba en aumento cuando el 1-1 lucía en el marcador. Primero fue agarrón por el cuello de Jordi Alba a Modric que se quedó sin castigo para el culé, para después ser testigos de un duro encontronazo entre Sergio Ramos y Luis Suárez, que esta vez sí fue saldado con amarilla para cada uno de los protagonistas.

Tras el descanso, Ernesto Valverde movió ficha y fue Semedo el que ingresó en el terreno de juego para ocupar el puesto que había quedado libre por la expulsión de Sergi Roberto. En el Madrid, también Zidane hizo un cambio. Cristiano Ronaldo, autor del gol del empate de los blancos, se hizo daño al marcar el tanto, su tobillo se dobló y pese a que pudo acabar la primera mitad, el entrenador francés decidió no arriesgar y fue Asensio el que entró en el lugar del '7' madridista.

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