"Fue bonito jugar en el Madrid", esas fueron las declaraciones de Cristiano Ronaldo que enturbiaron lo que era la gran fiesta del club después de conseguir su tercera Champions consecutiva. La Decimotercera vino acompañada de una bomba del portugués que todavía no se explican en la entidad blanca. No era el momento para lanzar ese mensaje y el propio futbolista intentó después enmendar su error cuando vio que sus palabras habían sentado mal tanto en las altas esferas como en el vestuario. 

Cristiano Ronaldo era perfectamente conocedor del alcance que iba a tener su mensaje. Lo hizo en caliente, pero quiso aprovechar para mandar un aviso y convertirse en el protagonista de una noche que era histórica para el Real Madrid. Su anuncio incluso eclipsó el partidazo de Gareth Bale y sus declaraciones, también poco afortunadas, en la televisión británica. El huracán originado por esa sibilina despedida del luso se convirtió en la noticia en el día que el club blanco logró el hecho histórico de ser la primera entidad en ser a la vez campeona de Europa en fútbol y baloncesto. 

CELOS DE NEYMAR

Los coqueteos del Real Madrid con Neymar no han sentado bien a Cristiano Ronaldo. El portugués es reacio a la llegada del brasileño, sobre todo cuando está pidiendo una importante mejora de contrato. El fichaje de la estrella del PSG ha puesto celoso al ganador de los últimos cinco Balones de Oro, ya que desea que el proyecto deportivo siga girando alrededor de su figura. 

El '7' aprovechó una ocasión inmejorable para pegar un toque, aunque sus palabras han creado un gran malestar. En el Real Madrid, de Florentino Pérez a Zidane, están todos encantados con el luso. De hecho, nadie duda de su continuidad porque tiene un contrato de larga duración y una cláusula de 1.000 millones de euros. Una cantidad inalcanzable y es que el club merengue no está dispuesto a negociar un traspaso. 

CRISTIANO, SIN SALIDA

La realidad es que Cristiano Ronaldo quiere una sustancial mejora de contrato, ya que Neymar cobra 37 millones de euros y Messi 40. El cariño que busca el luso es económico, ya que cree que está ante la última gran oportunidad de firmar un contrato por esas cantidades en el Real Madrid. Sin embargo, si algo ha mantenido la entidad merengue durante los últimos años es un equilibrio constante en los salarios. Nunca pagará los sueldos con los que el PSG, el City o el Barcelona están rompiendo el mercado. 

Cristiano Ronaldo está condenado a entenderse con el Real Madrid y encontrar una solución. Desde hace tiempo se daba por segura una subida salarial del delantero. Las amenazas del luso desde el pasado verano tienen que llegar a su fin y nadie duda de que el futbolista seguirá vistiendo de blanco la próxima temporada. Con un contrato hasta 2021, cuando el jugador tenga 36 años, el portugués deberá ceder en sus pretensiones y aceptar los más de 30 millones de euros que está dispuesto a ofrecer el club.

Además, las únicas opciones de una salida para Cristiano Ronaldo serían Manchester United o PSG. Los red devils no están por la labor y el propio Mourinho ha reconocido que el Balón de Oro no está en venta y que el mejor sitio para su compatriota es el Real Madrid. Por otro lado, el club francés no puede afrontar una operación tan costosa cuando está obligado a vender debido al Fair Play Financiero. Todos son conscientes, tanto Mou como Al-Khelaifi, de que la respuesta de Florentino Pérez a cualquier interés será la prohibitiva cláusula de rescisión. Por tanto, el laberinto de Cristiano solo tiene dos caminos: 1.000 millones o continuar en el Real Madrid.