Escándalo en la Federación: viaje de lujo para directivos y familias

Si el mundo del fútbol español pensaba que con salida de Ángel María Villar de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) los escándalos se acabarían hay que señalar que estaba completamente equivocado. Y es que, pese a la corta estancia de Luis Rubiales como flamante presidente de la Federación, el exfutbolista ha destapado otro caso de dudosa ética. Sin embargo, esta vez, el responsable no era Villar, sino su sucesor, Juan Luis Larrea. 

El actual presidente ha mostrado su "enfado" dado que "hay un viaje pactado de la anterior directiva" cerrado por los gestores pretéritos. Se trata de una travesía sin reparar en gastos del expresidente en el que se incluyen "directivos, patrocinadores, y familiares" y "ronda los dos millones de euros". 

Luis Rubiales considera "un despilfarro tremendo" y lamenta que el viaje ya esté cerrado con la agencia con la gravísima consecuencia de que no se puede devolver el dinero. "Creo que se debe viajar, invitar a familiares de futbolistas", continúa el mandatario, que no comprende cómo se puede organizar "unas macrovacaciones de 7-8 días en hoteles de superlujo". Además, ha sentenciado que "nos lo vamos a comer con 'papas'". 

UNA COMITIVA DE 155 PERSONAS

Al margen de la descripción que ha compartido el actual presidente de la Federación, también certifica que este gasto afectará a las primas de los jugadores españoles en el Mundial de Rusia. "Debemos llevar otro tipo de política", reprochaba Rubiales mientras acusaba directamente a Larrea, del que asegura que dio "una orden verbal". 

Su elevado precio deja entrever que la comitiva será grande. Lo confirma el propio presidente, que informa de que se trata de "un viaje para cerca de 155 personas". Un nuevo escándalo que salpica a la anterior directiva en el periodo más convulso de la historia de la organización. 

Además, el propio Rubiales ha confirmado que no ha podido hablar con los jugadores porque "he tenido la agenda muy apretada" y aboga por "hablar con ellos antes del partido" aunque en pequeñas dosis, pues "tienen que estar concentrados".