Una semana después de que Cristiano Ronaldo soltara la bomba sobre su futuro nada más terminar la final de Kiev y de que el Real Madrid acabara de proclamarse campeón de Europa por tercera vez consecutiva, el portugués sigue disfrutando de unas minivacaciones antes del Mundial de Rusia alejado por completo de los rumores. Está previsto que la estrella del combinado luso se incorpore este lunes a la concentración y que sea allí donde por fin vuelva a hablar sobre su situación en el club blanco. 

Portugal viaja el día 9 a Rusia y antes Cristiano quiere dejar zanjado el asunto sobre su continuidad o no en el Madrid. La intención del Balón de Oro es centrarse después en su selección y no volver a hablar sobre el equipo merengue hasta que termine su participación en el Mundial. El enfado continúa en la entidad madridista con el momento elegido por el futbolista para sembrar dudas sobre su futuro, ya que eclipsó parte de la celebración por La Decimotercera y hasta los propios compañeros del '7' le recriminaron sus palabras. 

EL MADRID NO CEDE AL PULSO DE CRISTIANO

Las expectativas salariales de Cristiano son de 40 millones de euros netos al año. Es decir, estar a la altura de Messi -42- y por encima de Neymar -que cobra 37-. El Real Madrid no llegará a esas cifras y no tiene ninguna intención de poner ese sueldo desorbitado a un jugador de 33 años y que en la actualidad tiene firmado hasta 2021. El club blanco no ve necesidad de revisar un contrato de hace poco más de año y medio. Florentino Pérez no está por la labor de hipotecar su política de salarios y romper el equilibrio en el vestuario merengue para contentar al portugués. 

Cristiano Ronaldo y el Real Madrid

En el Madrid esta situación se vive con tranquilidad, ya son varias las ocasiones en las que Cristiano ha reclamado cariño en forma de un aumento de sueldo. Se confía en que el máximo goleador de la Champions dé marcha atrás y es que la cláusula de 1.000 millones de euros fortalece la posición de la directiva merengue a la hora de no satisfacer una demandas salarias que están fuera de mercado. 

Falta por conocer la opinión del delantero tras una semana de reposo y reflexión. En el Real Madrid no gustan los pulsos y el luso debe dar públicamente un paso atrás después de su grave error en Kiev. El cariño y reconocimiento de la afición, del club y de Florentino Pérez ya lo tiene, pero debe comenzar a aceptar que el club blanco no pagará bajo ningún concepto los 40 'kilos' por temporada que reclama. 

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