La llegada de Cristiano Ronaldo a la concentración de la selección portuguesa se esperaba con expectación, pero el jugador del Real Madrid ha guardado de momento silencio y no ha aclarado nada sobre su situación en el club blanco. Sin embargo, Jorge Mendes mantuvo este martes una reunión en el Santiago Bernabéu para hablar, entre otros temas, del futuro del actual Balón de Oro. 

La posición del Real Madrid no ha cambiado desde las declaraciones de Cristiano tras la final de Kiev. A la entidad merengue no ha llegado ninguna propuesta por el portugués, ni tan siquiera alguna llamada preguntando sobre si el delantero está en venta. Por tanto, en el club de Chamartín mantienen la calma y se ciñen a la cláusula de 1.000 millones de euros si el futbolista desea abandonar este verano el conjunto blanco. 

Tal y como publicó EL BERNABÉU, el Madrid no tiene intención de pagar 40 millones de euros al año a Cristiano. Tampoco se entiende otra forma de cariño a la que se refiere el entorno del jugador, ya que en el club se cree que cuenta con el total reconocimiento de la directiva y de la afición. Además, Florentino Pérez juega con ventaja al saber que el luso no tiene ninguna oferta en firme y que Manchester United y PSG han asegurado en varias ocasiones que no están interesados actualmente en el fichaje del futbolista de 33 años. 

El 'caso Cristiano' amenaza con continuar a lo largo del verano, aunque, salvo giro inesperado de los acontecimientos, el portugués deberá dar su brazo a torcer y seguir vistiendo la elástica con el número '7' en el Santiago Bernabéu al menos durante la próxima temporada. Mientras, los coqueteos con Neymar y los mensajes al brasileño de sus compañeros de vestuario en el Madrid ponen a prueba los celos del de Madeira.