Luka Modric fue el protagonista del encuentro entre Croacia y Argentina. Un triunfo de 3-0 que dejó en evidencia al equipo de Messi y que demostró todo el potencial que tiene el centrocampista del Real Madrid. Su golazo y su dirección de juego le colocaron entre los mejores del mundo, una categoría que ya tiene fija entre todos los seguidores del equipo merengue.

Desde su propia selección también han alzado la voz para poner donde se merece al de Zadar. "Es un gran placer jugar con Luka Modric, uno de los mejores jugadores del mundo", aseguraba hace poco Dejan Lovren. Ha sido él, jugador del Liverpool, el que ha impulsado esa merecida campaña para que el centrocampista reciba todos los halagos que debería. Para el zaguero no hay duda: "Estaría aún más en el centro de atención si fuera alemán o español".

Además, asegura que "podría ganar el Balón de Oro". No es ninguna tontería ya que en su día muchos otros grandes jugadores de su misma posición lograron pelear por el galardón. Sin embargo, se ha instaurado esa monotonía de que quien lo gane sea un goleador nato que lidere todas las tablas de anotación. Modric no está en ellas pero sí que participa, repartiendo asistencias en los partidos más complicados y contra los rivales más cerrados. Lovren lo sabe: "Es un jugador increíble". 

Su presencia será clave para que Croacia avance en este Mundial de Rusia y a sus 32 años va adquiriendo más y más calidad. El Real Madrid puede estar contento con la inversión que en su día hizo a pesar de la movilización de ciertos medios para desacreditarle, llegando a tacharle de "fichaje de medio pelo".