No está siendo un buen Mundial para Mohamed Salah. El extremo del Liverpool llegó muy justo a la competición, después de una lesión por una desafortunada caída de la que se culpó, injustamente, a Sergio Ramos, y no pudo disputar el primer partido de la fase de grupos contra Uruguay. Posteriormente, en la segunda jornada, sí pudo ser de la partida y reaparecer sobre el terreno de juego, pero la anfitriona le pasó por encima y frustró todo tipo de aspiraciones.

Con su selección ya eliminada, aunque no fue capaz de darle ningún punto a su país, ante Arabia Saudí pudo volver a reencontrarse con su juego y dejar algunos detalles de su calidad, algo que le llevó a ser nombrado MVP -mejor jugador del partido-. No obstante, el futbolista que recibe este honor tiene un compromiso: obligatoriamente, tiene que acudir a una conferencia de prensa donde responde a algunas preguntas sobre el encuentro y su actuación. Sin embargo, Salah no lo hizo. Incumplió, el pasado lunes, una de sus obligaciones y la FIFA está encontrando la explicación a lo sucedido.

LA FIFA ESTUDIA SU AUSENCIA

El jugador alegó, en un primer momento, problemas de salud, pero las explicaciones no parecen convencer del todo al organismo que se encarga de regir el fútbol, que está intentando aclarar si realmente ese fue el motivo de su no comparecencia ante las cámara. El 'Faraón' ha visto como su temporada idílica ha ido de menos a más, para terminar diciendo adiós al Mundial de esta manera.