El Mundial de Rusia va a ser el escenario perfecto para que Neymar demuestre estar capacitado para el Real Madrid. Sus gestos, sus actuaciones, sus declaraciones y su evolución serán analizadas concienzudamente para comprobar si el brasileño es la estrella perfecta para el equipo merengue. El club le quiere y sabe de sus capacidades. Por el momento, y una vez finalizada la fase de grupos, el '10' está aprobando.
LIDERAZGO PARA LLAMAR AL MADRID
El último partido de Brasil resultaba clave en su futuro en la competición. Una derrota e incluso un empate podía haberles dejado fuera, pero el conjunto de Tite cumplió con nota. En gran parte gracias a la labor de un Neymar que firmó su mejor partido hasta el momento en Rusia. Sin marcar, pero sí asistiendo y dejando una verdadera imagen de capitán.
Algo necesario para llegar al Real Madrid y más teniendo en cuenta el papel que ha desarrollado Cristiano Ronaldo desde la temporada 2009. La presión de portar la elástica blanca es incomparable a la de ningún otro club. Además, el atacante del PSG sigue con vida y persiguiendo al luso y a Messi en el campeonato de selecciones.
El brasileño lo intentó en repetidas ocasiones pero el tanto no llegó. Un centro desde el córner le daba el 2-0 a la Canarinha y a Neymar una asistencia en su cuenta particular. Pero fue su actitud la que más gustó. Su actitud y, cómo no, su estado físico. Ni rastro de esos dolores que en citas anteriores habían salido a relucir. Las faltas que Suiza y Costa Rica cargaron contra el delantero, en esta ocasión, no se vieron en gran número. El '10' estuvo activo y moviendo completamente la defensa rival. En Brasil, los medios de comunicación, ya han dejado claro que es su mejor encuentro.
SUPERANDO BARRERAS
Este Mundial no ha sido el más fácil para Neymar. Las críticas le han llovido desde antes de que comenzara la competición y una vez que sonó el pitido inicial estas no han hecho más que aumentar. Señalando una supuesta exageración en las faltas, con actitudes que han calificado de antideportivas y con un rendimiento que pecaba de individualista. Incluso sus amigos han tenido que salir a defenderle en redes sociales, provocando la intervención del padre del jugador para calmar el ambiente.
Con todo ello ha sabido lidiar un Neymar que se mantiene cauto pero correcto. Las lágrimas que protagonizó en el triunfo ante Costa Rica sentenciaron cualquier tipo de compromiso que se pusiera en duda. La tensión acumulada se pudo comprobar encarnada en Neymar.
SILENCIO HASTA EL FINAL DEL MUNDIAL
El delantero no hablará hasta que no acabe la competición. Es la línea que siguen la mayoría de estrellas que están disputando el Mundial de Rusia. El PSG no le quiere dejar salir pero el Real Madrid, tal y como adelantó EL BERNABÉU, lo intentará hasta el final.
Además, el jugador está por la labor de vestir de blanco. Ya hace unos días salía a la luz una fotografía en la que el jugador aparecía en la plantilla del Infantil A de La Fábrica. Una imagen que deja claro que Neymar siempre ha querido triunfar en el Santiago Bernabéu. De momento está a poco más de 15 días de poder pronunciarse al respecto de su futuro.