España se juega el todo por el todo ante Rusia. Un tropiezo mandaría a la Selección a la calle de forma prematura y en un cuadro en el que no tiene demasiadas complicaciones, al menos a priori. 

El juego del combinado de Fernando Hierro  no es nada halagüeño y los rusos no tienen nada que perder. Una situación incómoda para la Selección, sobre la que recaerá toda la presión en un momento en el que vive sumida en un mar de dudas. 

La Selección podría experimentar ciertos cambios ante el conjunto del exmadridista Denis Cheryshev. De los nombres que se manejan, se encuentran Nacho, Koke y Marco Asensio. El balear podría ser el revulsivo que necesita el combinado nacional para esta clase de partidos. Ha estado prácticamente inédito durante todo el Mundial, pero podría adquirir protagonismo en la fase final del mismo y ante la anfitriona. 

EL AS EN LA MANGA

El jugador balear a duras penas ha contado con minutos para demostrar su valía con la camiseta de España. El jugador madridista ha sido de la partida en los tramos finales de las segundas partes en los partidos de Irán y Marruecos. Una participación escasa para un futbolista que ha demostrado su valía en el Real Madrid. 

El seleccionador nacional maneja la opción de Marco Asensio para erradicar uno de los males de España, el tiro desde fuera. El balear cuenta con una gran capacidad de disparo, capaz de sorprender desde lejos y con una colocación envidiable. Unas cualidades que el seleccionador nacional podría tener en cuenta. 

EL DÚO CON ISCO

Su elección también podría basarse por la gran capacidad de entendimiento con Isco Alarcón. En el Madrid han conformado una gran asociación, con una compenetración que asusta a los rivales. Dos jugadores que pueden causar estragos en la defensa de una Rusia confiada que no esperará una pareja tan ofensiva como la de los madridistas. 

Además, cabe señalar que el malagueño está tocado por una varita en estos momentos. Está siendo el faro que guía a una España sumida en el desconcierto, lo que le podría ir bien a Asensio a la hora de combinar, pues la movilidad de Isco ofrece muchas posibilidades ofensivas a sus compañeros.