El Real Madrid se enfrenta a una temporada en la que tiene que cambiar el chip. Es el año uno tras Cristiano Ronaldo y es el momento de que los galones los asuman otros futbolistas y de momento está funcionando y prometen dar un rejuvenecedor aire a la vanguardia madridista. Lopetegui no puede contar con la BBC, pero ha encontrado una tripleta ofensiva que la sustituye perfectamente. En realidad, es un jugador que combina a la perfección con las dos 'b' de la ecuación. Asensio ha creado la BBA.
Sin Cristiano, los merengues pierden 40 goles por campaña prácticamente, aunque todo tiene su parte buena. Y es que Bale, Benzema y Asensio han asumido más protagonismo y, sobre todo, están más liberados. Sobre todo el francés, que ya no tiene que nutrir al que durante nueve años ha sido su socio perfecto. Todo ha cambiado y es una variante positiva.
La liberación de Bale y Benzema
La marcha de Cristiano Ronaldo ha facilitado que el resto de sus compañeros adquieran un protagonismo que no han tenido hasta este momento. La gigantesca figura del portugués ensombrecía a cualquiera de sus ya excompañeros del extinto tridente. Bale y Benzema estaban bajo la sombra del jugador portugués, que siempre ha emitido su luz propia.
Por este motivo, pese a haber permutas en las posiciones en algún que otro partido y no con mucha asiduidad, su marcha potenciará un mejor rendimiento de los dos jugadores en cuestión. Benzema ya no es necesariamente el '9' del Real Madrid, como lo era con el luso, sino que busca otras posiciones y está en cambio constante con sus compañeros. Incluso Bale ha adquirido el papel de líder y, de momento lo está llevando a la perfección. Una asistencia de lujo - en la Supercopa - y un gol ante el Getafe, estrenándose como referencia ofensiva en La Liga.
En constante movimiento
Julen Lopetegui sabe del poder que ostentan Bale y Benzema y quiere exprimirlo al máximo. Los dos atacantes blancos han cambiado el chip para este curso. Saben que hay unos galones que tienen que asumir y, por el momento, lo están haciendo. Están ofreciendo la mejor versión de ellos mismos y gracias a la libertad que les otorga el entrenador vasco para moverse por dónde les plazca - con cierto orden - en la zona ofensiva merengue.
Benzema no tiene por qué quedarse fijo en el área, ni Bale en la derecha. Según avanzan los partidos, los miembros de la BBA permutan sus posiciones para sorprender al rival y crear un abanico de posibilidades en el ataque merengue.
Libertad para Asensio
El balear no es un jugador al que le guste estar fijo en una posición durante los 90 minutos. Lopetegui le conoce de sobra y considera que es mejor otorgarle la libertad que necesita para desplegar su fútbol. Marco Asensio es la gran esperanza del Real Madrid para este año y el técnico vasco sabe por dónde puede explotar el talento de la joven promesa que quiere convertirse en realidad.
De momento, el atacante balear del Real Madrid está respondiendo a la confianza de su técnico con buenos minutos. Sólo le falta el gol en estos dos primeros partidos oficiales de la pretemporada y lo ha rozado. El palo evitó que, el pasado domingo, estrenara su cuenta realizadora en este año en el que tiene que demostrar que, además de jugar al fútbol y entenderlo de maravilla, también sabe marcar goles. Es decir, lo que ha hecho estos dos últimos años pero corregido y aumentado.
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