El Real Madrid vivió este jueves una de sus noches más gloriosas en cuanto a grandes galas se refiere. El club blanco fue el dominador absoluto e incuestionable de la cita y todo giró alrededor de la entidad a quien acompañaron durante el acto viejos conocidos como Beckham o Kaká. Pero ellos no serían los protagonistas, sino varios de los futbolistas de Lopetegui.
El Madrid acaparó todos los premios en todas las posiciones de la pasada temporada de la Champions. El premio al mejor portero, al defensa, al centrocampista y al delantero fueron para futbolistas blancos, siendo Keylor Navas, Sergio Ramos, Luka Modric y Cristiano Ronaldo -ya en la Juventus- los galardonados.
La guinda llegaría en el cierre de la gala, cuando Modric fue nombrado Jugador del Año por la UEFA. Lo hizo por delante de Salah, que tuvo que reencontrarse con Ramos, y Cristiano Ronaldo, quien 'pasó' de volver a verse las caras con sus excompañeros en un acto que fue conducido al compás del trece veces campeón de Europa.
El Madrid vuelve a superarse a sí mismo
El club blanco hizo este jueves lo nunca antes visto. Un pleno histórico con el que el Real Madrid ha puesto el broche de oro a un lustro lleno de éxitos. Ya se rozó la gesta el año pasado tras la consecución de La Duodécima, pero Buffon le arrebató a Keylor Navas el premio al mejor portero de la temporada. Nunca antes un equipo había dominado de tal manera, ni siquiera el catalogado mejor Barça de la historia con Guardiola, y es que La Decimotercera y la última gala UEFA han terminado por rendir al mundo del fútbol ante un equipo de leyenda.
El resumen es claro, conciso e irrevocable por nadie. Cuatro Champions en cinco años y tres de ellas consecutivas seguidas. De los últimos cuatro Balones de Oro, tres han ido a parar a Cristiano, quien gracias a estos últimos años en el Madrid ha logrado ponerse a la misma altura, en cuanto a premios individuales se refiere, de su archienemigo Leo Messi. Una hazaña, la del club blanco, que parece insuperable pero a la que, un año más, aspira a mejorar este equipo.
La gala se ha convertido en el chute de adrenalina que le faltaba a este Real Madrid para terminar de estar convencido de que este año aún pueden ir a más y volver a repetir los mismo éxitos que tan alto le ha colocado en la historia de este deporte. Tras un verano en el que se ha dado por muerto a este equipo, la plantilla está convencida de que están capacitados para dar otro golpe sobre la mesa y así lo dejó claro el capitán Sergio Ramos cuando habló ante los micrófonos tras ser designado mejor defensa de la temporada.
El mejor del mundo sigue estando en el Real Madrid
Los premios individuales parece que se quedan en el Real Madrid. Luka Modric cogió el relevo del premio UEFA ante un Cristiano, desaparecido, y a quien se le agota su reinado como mejor jugador del mundo. Ese honor se queda en el Madrid y el croata, tras una enorme carrera redondeada con la Champions de Kiev y su gran actuación en el Mundial, está preparado para levantar el The Best y el Balón de Oro que premian al mejor del 2019.
Pero las aspiraciones merengues van más allá. Las salidas de Zidane y Cristiano en los últimos meses fueron aprovechadas por todos aquellos que no pegan ojo cuando sueñan con ver caer a este equipo. El vestuario se ha reforzado, es más familia que nunca, y se ve capacitado de levantar su cuarta Champions consecutiva. El camino ya lo conoce y ahora toca dar una nueva estocada al mundo del fútbol.
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