La última vez que el Real Madrid ganó las tres primeras jornadas de Liga acabó conquistando el campeonato doméstico. Esta fue una de las mayores alegrías del entrenador francés, Zinedine Zidane, en el banquillo blanco, y el principal objetivo de un Julen Lopetegui que comienza con pleno de triunfos y diez goles a favor de su equipo.
El cuadro merengue va ganando solidez a base de triunfos y cumpliendo con las pautas marcadas por el entrenador vasco antes del parón de selecciones. El primer paso se dio con la victoria ante el Getafe, le siguió la primera remontada del curso en Montilivi, estadio donde cayó derrotado la anterior temporada y que esta vez acabó en goleada gracias a una gran segunda mitad. Ese mismo resultado ha sido repetido por la plantilla blanca en su casa, el Santiago Bernabéu, en un partido muy completo frente al Leganés.
La última ocasión que el club madridista comenzó La Liga con pleno de triunfos en las tres primeras jornadas fue hace dos años atrás. Tal y como ha ocurrido esta temporada, el Madrid enfocó este torneo como su gran reto y lo acabó conquistando en un título que Zidane siempre confesó que le hizo más ilusión que las tres Ligas de Campeones consecutivas conseguidas.
Gran mejoría
En la temporada 2016/17 el buen inicio del Real Madrid duró cuatro jornadas. No fue hasta la quinta cuando sufrió el primer tropezón, donde empataron ante el Villarreal. Hasta entonces había conquistado Anoeta, Celta, Osasuna y al Espanyol.
Nada que ver con la última edición que arrancaba con dos empates consecutivos en el Santiago Bernabéu ante Valencia y Levante. Ahora, tras igualar en estas tres jornadas el camino a la última Liga, marcando los mismos goles -10- y encajando uno menos -2-, los jugadores de Lopetegui deberían de ganar al Athletic para firmar el mejor arranque.
Desde el año 2000, tan solo en cuatro de 17 Ligas disputadas, el club madrileño comenzó ganando las tres primeras jornadas. En la 2007/2008 pinchó en la cuarta al empatar en Valladolid, pero la 2009/2010 fue el mejor inicio con cinco victorias consecutivas. Su racha se vio frenada con derrota frente al Sevilla. Finalmente, en la 2013/2014 hubo un nuevo sosiego en la cuarta jornada con un empate en casa del Villarreal y la última, la Liga ganada con Zidane en el banquillo.
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