El Real Madrid sumó su primera derrota en Liga este miércoles contra el Sevilla. El club blanco cayó 3-0 y salieron a relucir fantasmas de la temporada pasada. Sin embargo, el trabajo de Lopetegui enfocado a la competición doméstica está dando sus resultados y ya se ha visto una versión mejorada del equipo este año. Aún le quedan aspectos que resolver.

Los errores que ha resuelto Lopetegui

El Santiago Bernabéu es ahora un fortín

La temporada pasada se hizo habitual la imagen del madridismo enfadado con la versión mostrada por su equipo en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid no carburaba en casa. La alta presión de la afición merengue penalizó al equipo que en Liga y sobre todo en Copa del Rey -donde jugaron los más jóvenes- se bloqueaba y acababa concediendo demasiado a sus rivales. 

Esta temporada, sin embargo, la cosa ha cambiado en casa. El Real Madrid solo conoce la victoria en su estadio. Getafe, Leganés y Espanyol han pasado por el coliseo blanco y han salido derrotados. Eso sí, las dos últimas visitas fuera de casa le han pasado factura al club blanco, aunque eran dos feudos muy complicados: San Mamés y Sánchez Pizjuán.

El Real Madrid ya cierra los partidos

El Real Madrid dejó escapar muchos puntos el año pasado en partidos que comenzaron abriendo el marcador. Una vez llegaba el primer gol blanco, el equipo se veía afectado por una relajación de la que sus rivales sacaban partido para meterse en el encuentro. El Madrid entregaba la pelota y en más de una ocasión le costó caro. Ahora, con Lopetegui en el banquillo, ya cierra los partidos. La del Espanyol ha sido la única victoria que ha llegado con solo una diferencia de un gol favorable al Madrid.

El bloque ahora defiende más

La salida de Cristiano Ronaldo ha obligado al equipo a ser más un bloque tanto en ataque como en defensa. Esto, sobre todo, se ha notado en la parte defensiva donde todos trabajan. Antes se acostumbraba a ver al Madrid partido, siendo raro ver a sus atacantes defender. Sin embargo, contra el Sevilla se pudo ver como Bale fue de los que más trabajó atrás. Asensio, Benzema, Isco, etc. todos están comprometidos en la causa y es que Lopetegui ha logrado que sobre el campo el Madrid sea un bloque nunca visto en la última década.

Las cuentas pendientes por resolver

Hay que salir enchufados al partido

Poco a poco parecía que el Real Madrid se acostumbraba a saltar a tope al campo. El curso pasado se concedía mucho en los primeros minutos y Lopetegui ha insistido mucho en salir con contundencia a los partidos. El problema, sin embargo, persiste y contra el Sevilla se vio a un Madrid que entró dormido. El conjunto hispalense se hizo rápido con el control total del choque y acabó sucediendo lo inevitable, el gol de los de Machín llegó en el minuto 17.

Misma intensidad que en Champions

Es difícil de entender como el Real Madrid ha pasado en una semana de pasar por encima de la Roma en Champions a conceder un 3-0 en el Sánchez Pizjuán. Es, sin duda, el peor síntoma que tiene este equipo y es que la versión que se ve de él en Liga es peor que la que ofrecen en la competición reina de Europa. Al Madrid le 'pone' la Champions, eso es indiscutible, pero Lopetegui debe conseguir que esa imagen del equipo se traslade también a La Liga.

El derbi es el siguiente partido del Madrid en Liga. Teniendo en cuenta que viene de la derrota en Sevilla y tratándose del partido que es, intensidad no faltará. Luego viene la Champions y el Madrid se tiene que contagiar de cara al choque contra el Alavés, el último antes del próximo parón internacional.

Goles que llegan de regalos

El Madrid concede menos. Atrás ha mejorado gracias al trabajo colectivo, pero se siguen cometiendo errores innecesarios que dan vida al rival. Contra el Sevilla los dos primeros goles llegaron propiciados por dos pérdidas, la primera de ellas clamorosa por parte de Marcelo y Casemiro. El tercero también llegó de un fallo a la hora de despejar un córner.