La victoria del Real Madrid ante el Viktoria Pilsen en la nueva jornada de la Champions ha tenido un contratiempo inesperado para el conjunto de Julen Lopetegui. Ya con el partido en los últimos minutos, Marcelo tenía que retirarse del terreno de juego lesionado con gesto de dolor, lo cual hacía saltar todas las alarmas en el Santiago Bernabéu a la víspera de El Clásico.

El lateral brasileño ha vuelto a ser protagonista en todos los aspectos durante el transcurso del partido. Pese a haber cometido algún error defensivo, el '12' blanco volvía a reencontrarse con el gol en la segunda parte del duelo, tal y como lo hacía en el último encuentro liguero contra el Levante, poniendo fin a una sequía goleadora de más de ocho horas, que empezaba en la visita al Sánchez Pizjuán contra el Sevilla.

Sin embargo, la otra cara de la moneda se iba a ver casi transcurridos los 90 minutos reglamentarios. Ya con los tres cambios cumplidos, cuya última entrada al césped del coliseo blanco era la de Mariano en lugar de Benzema, Marcelo iba a volver a resentirse muscularmente, quedando tirado en el suelo con gesto de dolor. De hecho, él mismo vio que no podía completar el partido y se vio obligado a dejar a los suyos con 10, siendo un motivo de gran preocupación de cara al devenir de los de Lopetegui.

Un contratiempo inoportuno

Y es que el próximo domingo 28 de octubre, el conjunto de Concha Espina afrontará su visita al Camp Nou para enfrentarse al Barcelona en una nueva jornada liguera. Dada la situación actual de la clasificación, el encuentro se presenta como clave para los de Lopetegui, pues de conseguir la victoria volverían a entrar en puestos europeos, mientras que otra derrota complicaría mucho las cosas a los blancos en la pelea por La Liga.