Messi confirma que verá el River-Boca en el Bernabéu; Cristiano aún no
- Al argentino ya ha confirmado que asistirá a al encuentro, el portugués todavía no lo ha asegurado.
- El entorno de Cristiano Ronaldo explota por el Balón de Oro de Modric
- La reventa del River - Boca arranca y supera los 3.000 euros
La final de la Copa Libertadores apunta a ser uno de los mayores eventos futbolísticos de toda la historia. River Plate y Boca Juniors se verán las caras el próximo domingo 9 de diciembre en el Santiago Bernabéu y nadie querrá perdérselo. Esto incluiría a los dos grandes futbolistas modernos: Cristiano Ronaldo y Messi.
Tanto el portugués como el argentino estarán sentados en el palco del Santiago Bernabéu para presenciar la final de la Libertadores en primera persona. Será por tanto la primera vez que Cristiano Ronaldo vuelva al coliseo blanco después de su salida del club el pasado verano, aunque todavía no ha confirmado su presencia.
La Federación habría facilitado la entrada a Leo Messi, que ya ha confirmado su presencia en el encuentro después de que se pusiera en contacto directamente con la RFEF, como hicieron otros jugadores de Primera y Segunda División. Cristiano, sin embargo, le habría pedido directamente las entradas al Real Madrid. La imagen de ver juntos en el palco a los dos mejores jugadores de la última década sería cuanto menos llamativa. Es por ello que tanto la Federación como la CONMEBOL habría accedido a darles todas las facilidades a los dos astros.
El 'planning' de los dos astros
El calendario les permitiría a ambos acudir al Santiago Bernabéu. Cristiano juega el viernes con la Juventus frente al Inter de Milán, mientras que Messi lo hace el sábado con el Barcelona frente al Espanyol en Cornellá. El '10', en principio, viajaría a la capital el mismo domingo por la mañana, mientras que el '7' aprovecharía para pasar el fin de semana en Madrid.
El tan esperado regreso de Cristiano a la que fue su casa durante nueve temporadas no se daría, por tanto, en los terrenos de juego, ni en un partido del Real Madrid. El delantero luso jugó su último partido en el Santiago Bernabéu el pasado mes de mayo. En total, han pasado siete meses desde entonces, en los que la relación club - jugador se rompieron por completo hasta certificarse su marcha.