El debut de Zidane en el Real Madrid dejó muchos análisis. Más allá de la victoria y de la ilusión devuelta al madridismo, el técnico francés confió en los grandes señalados por Solari durante su paso por el banquillo. Zidane dejó ver a Marcelo, Isco, Asensio, Bale y Ceballos y todos ellos respondieron bien. Sorprendió en especial el caso de los dos últimos, a priori los grandes perjudicados de la vuelta de Zizou.

El regreso de Zidane señaló de lleno a Bale y Ceballos. Si hubiera que señalar a dos jugadores que no terminaron bien con el técnico francés tras la temporada pasada serían ellos. Uno perdió la titularidad y su rol protagonista con él, mientras que el otro estuvo apenas inédito tras fichar en verano. Curiosamente eran también dos en los que Solari perdió la confianza.

Las rajadas de Bale y Ceballos que perdonó Zidane

Tampoco han faltado las pullas de Bale y Ceballos a Zidane desde la marcha de este. "Estaba bastante enfadado, para ser sincero. Obviamente, sentía que merecía ser titular", recordaba meses atrás sobre su suplencia en la final de Kiev. "No habló conmigo después de la final; de hecho, todavía no he hablado con él", añadía para dejar claro que su relación fue "estrictamente profesional". Su agente, Jonathan Barnett, echaba más leña al fuego hace apenas unos días.

Ceballos fue incluso más claro. "El que tiene que explicar por qué no me daba oportunidades es él", decía a comienzos de temporada sobre Zidane. Mostró la frustración que sentía con Zidane y confesó que su marcha no le venía mal. "Zidane fue claro conmigo y no le guardo rencor. Quizá no sabía lo que siente un jugador en el banquillo. Y le servirá también en el futuro para no cometer los errores que ha cometido aquí... Si seguía Zidane, tenía que buscarme una salida", así de rotundo fue Ceballos. El que parece no guardar ningún rencor a él y a Bale es el propio Zidane.

Todos tiene hueco con Zidane

Bale fue titular. Tampoco había muchas más opciones por culpa de las lesiones, pero por delante se le presentaba una oportunidad importante, la cual aprovechó. Dio motivos para creer en él, aunque su futuro apunta fuera del Real Madrid. Estrelló un balón en el larguero, cerró el partido y rozó otro gol más de no ser por Rubén. Volvió Bale aunque fuera por un día. Para rematar, celebró su tanto con todo sus compañeros, en una piña, olvidando aquel capítulo oscuro en el Ciutat de Valencia.

Ceballos tuvo que esperar en el banquillo, pero fue el primer cambio de Zidane. Entró por Isco justo después del gol del malagueño. Zidane le dijo que jugara y disfrutara y así lo hizo. Dejó muestras de su calidad, la cual se apagó con Solari desde su gol en el Villamarín. Al final del partido parecía incluso celebrar la vuelta de Zidane: "Parece que ha funcionado el cambio de entrenador", dijo a pie de campo. Una nueva vida de Ceballos con Zidane.

Todos tienen hueco con Zidane en este Madrid. Quedan diez partidos y todos los jugadores tendrán la oportunidad de demostrar que merecen seguir. El francés todavía no piensa en el futuro, solo se centra en ver de lo que son capaces de dar sus jugadores y, de momento, ya ha comprobado que con él son otros. Un cambio de imagen necesario tras la debacle de la temporada y que ilusiona para la que viene.

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