El nuevo proyecto de Zidane en el Real Madrid está muy cerca de echar a andar en las próximas semanas. El día 8 de julio se iniciará la pretemporada en Valdebebas y posteriormente los madridistas pondrán rumbo a América para sus stages estivales en Canadá y Estados Unidos. Unas fechas en las que el técnico galo comenzará a configurar su nuevo equipo, aunque desde que aterrizó en el banquillo blanco ya ha tomado muchas decisiones respecto al futuro de la plantilla.
El pasado mes de marzo Florentino Pérez certificaba el retorno de Zidane al banquillo del Real Madrid. La jugada del máximo mandatario blanco era clara: comenzar a pensar en el nuevo proyecto que llegaría a Concha Espina en verano. Nuevos fichajes, muchas salidas y un equipo renovado. Estas eran las premisas en Chamartín para hacer que el cuadro blanco volviera a cosechar éxitos.
Zidane retornó al Santiago Bernabéu con la condición de tener más poder de decisión en materia deportiva. El técnico quería ejercer con total libertad y tener voz directa en la planificación de su nuevo equipo, algo que se ha certificado con los nuevos fichajes. El club ha cumplido las peticiones de Zidane y ha traído un delantero goleador, un lateral zurdo, a Hazard y está a la espera de uno o dos centrocampistas, entre los que se encuentra el gran anhelo de 'Zizou', Paul Pogba.
Sin embargo, la mayor apuesta de Zidane para su nuevo Real Madrid no llegará en materia de fichajes. Más bien de continuidades. El técnico galo sabe que necesita jugadores experimentados en la élite del fútbol que conozcan lo que es el conjunto blanco. Por ello ha optado por mantener y proteger al núcleo duro de la plantilla merengue.
Recuperar a los veteranos
Esto se refleja en como el técnico ha buscado recuperar la mejor versión de jugadores como Marcelo y Modric. Por encima de todo, Zidane quiere contar con el croata y el brasileño, no está interesado en nuevos fichajes que les suplan. A su vez, está filosofía también se ejemplifica con la renovación de Kroos hasta 2023 o los galones que tendrá Benzema como líder indiscutible del ataque madridista.
El galo ha conseguido sus éxitos con esta terna de futbolistas y quiere seguir ganando con ellos. Con esta política Zidane quiere conseguir crear un buen ambiente de grupo, donde impere la alegría y la tranquilidad. El técnico quiere tener contentos a los pesos pesados del equipo para que la dinámica de trabajo trabajo se desarrolle como si viajara en una balsa de aceite.
Zidane espera que respondan
Ahora son los jugadores los que tendrán que responder a Zidane. El técnico les está dando poder y protagonismo en el equipo, incluso desplazando a otros futbolistas en favor de ellos. Todo ello con el objetivo de inyectarles una dosis extra de confianza para sacar sus mejores versiones.
[Más información: El PSG cambia su filosofía de fichajes: Neymar y Mbappé podrían salir de París]