Uno de los fichajes tapados más importantes del Real Madrid está siendo James Rodríguez. Aunque el jugador ya estaba en la nómina de futbolistas del Real Madrid, el colombiano regresó este verano de su cesión en el Bayern y ha iniciado la temporada a pleno rendimiento. Sin embargo, todavía necesita seguir trabajando para ganarse un sitio importante en el equipo blanco.
La competencia en la plantilla merengue es máxima y el centrocampista tiene que 'rivalizar' con otros jugadores de nivel como Kroos, Modric, Hazard y Bale por un puesto en los onces de Zidane. Una tarea que no es sencilla, aunque el técnico francés haya manifestado su intención de utilizar a los 25 efectivos de su plantel.
La metamorfosis de James
La incidencia de James en el tramo inicial de Liga ha sido muy satisfactoria, ya que el jugador ha mostrado un compromiso importante con el equipo. El colombiano es uno más cuando el equipo se suma al ataque, sin embargo, su metamorfosis se ha dado en defensa. Y es que el colombiano se ha apropiado del concepto predilecto de Zidane para basar en él su juego: la intensidad.
James ha demostrado poder jugar en el centro del campo como interior, sosteniendo al equipo y dirigiendo la creación de juego ofensivo con maestría, sin poner oposición a correr para recuperar cualquier balón. Un cambio de actitud con el que habría empezado a conquistar la voluntad del técnico francés, aunque no de forma indiscutible.
El principal objetivo de James estas semanas es el de aprovechar el parón de selecciones para seguir entrenando y estar concentrado para cuando el Real Madrid regrese a su dinámica habitual de competición. El centrocampista sabe que a finales de octubre llegará una semana con tres partidos de nivel (Mallorca, Galatasaray y Barcelona) en los que el conjunto blanco se juega mucho más que nueve puntos.
El jugador sabe que ha rendido a buen nivel cuando Zidane le ha brindado oportunidades de juego y es algo que quiere aprovechar. De hecho, en el último partido de Liga contra el Granada saltó al campo desde el banquillo y tardó poco en conseguir un gol. Una acción que demuestra su estado de implicación y concentración.
Concentrado en Valdebebas
Ahora tendrá 10 días por delante para seguir preparándose en Valdebebas, algo que será clave para mantener la confianza que Zidane está empezando a depositar en él. El colombiano no quiere perder su oportunidad, sobre todo cuando se sitúa como el 11º jugador más utilizado por el francés en este inicio de temporada. Así lo atestiguan los 321 minutos que ha disputado hasta el momento.
Para cumplir con su plan, James está aprovechando su no convocatoria con Colombia para seguir trabajando en la Ciudad Real Madrid con los internacionales que no han viajado con sus selecciones. De hecho, el centrocampista ha llegado a acudir a ejercitarse, incluso, en su día libre.
[Más información: James no se entrena con el grupo y Marcelo ya está listo para el Mallorca]