Luka Modric, salvo sorpresa, formará parte del grupo que volverá a los entrenamientos este lunes en Valdebebas. El croata regresa al Real Madrid antes de tiempo para comenzar los próximos compromisos ante Real Sociedad y PSG, pese a que todavía Croacia se deberá medir ante Georgia en un amistoso tras cerrar la fase de clasificación a la Eurocopa 2020.
Modric pactó con su selección renunciar a jugar el partido de este martes contra Georgia. Lo hizo a sabiendas que el billete a la Eurocopa 2020 estaría asegurado si vencían el pasado sábado a Eslovaquia, como acabó ocurriendo. Por esa razón, el '10' volverá antes de tiempo con el visto bueno de su selección y con un gesto que desde Madrid agradecerán.
En el Madrid existía cierta preocupación con el caso Modric. El croata ya había sufrido dos lesiones en sus últimas llamadas con su selección y de la última (que sufrió hace solo un mes) apenas había regresado diez días antes de volver a irse con Croacia. El temor a una recaída era real y en el club no había sentado del todo bien su llamada para el presente parón.
La semana de Modric
Pero Modric ya está liberado tras haber vivido una semana muy especial. Recogió el Golden Foot, firmó su clasificación para la Eurocopa y este domingo presentó su autobiografía en Zagreb, ante una gran expectación de sus compatriotas en la firma de libros y luego en un acto privado al que acudieron figuras como Marcelo, Butragueño o Suker.
Zidane ya espera a Modric este lunes para seguir con su puesta a punto en una temporada que de momento ha estado marcada por sus lesiones y la irrupción de Valverde en el once titular. La presencia del uruguayo le permitirá al '10' tomarse un respiro de vez en cuando y cuidar su físico a sus 34 años.