El Real Madrid afronta el último parón del año con la mente puesta en la recta final de curso que le espera al equipo. Siete partidos en 26 días que dejan a Zidane intranquilo con los partidos de selecciones, ya que el conjunto blanco no puede permitirse más bajas que mermen el rendimiento del equipo.
La temporada empezó de forma inestable para los blancos, pero el técnico francés consiguió reconducir la situación del equipo tras la derrota en Son Moix contra el Mallorca. Cinco partidos en los que el Real Madrid se ha mantenido invicto con 16 goles a favor y ninguno en contra. Cifras no vistas en el equipo desde que 'Zizou' aterrizó en marzo en Chamartín.
El objetivo del Real Madrid ahora es conseguir mantener la positiva racha del equipo de cara a 2020. Acabar el año con buen sabor es una de las máximas que tiene el conjunto blanco esta temporada, aunque para ello deberá superar un Tourmalet de partidos de altos vueltos.
Siete partidos en 26 días
Los blancos tendrán que hacer frente a siete partidos en apenas 26 días, entre los que se incluye un Clásico que se jugará en el Camp Nou el próximo 18 de diciembre, justo dentro de un mes. Antes, Zidane tendrá que tener el equipo a pleno rendimiento para visitar campos complicados como Mestalla (Valencia - 15 de diciembre) o recibir a la Real Sociedad (23 de noviembre) en el Santiago Bernabéu.
El feudo merengue debe convertirse en un fortín inexpugnable, ya que solo tres de los siete partidos se jugarán en casa. Una tarea que no será sencilla con la visita del PSG en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions.
La visita del Espanyol, el viaje a Mendizorroza (Alavés) y el duelo en Bélgica contra el Brujas será los encuentros más asequibles que tendrán los madridistas en la recta final de año antes de jugarse el liderato contra el Barça.
La guerra por la Champions
Todos estos partidos llegan en una temporada en la que el Real Madrid no ha sido fiable en Champions y se encuentra remando a contracorriente por el liderato del Grupo A. Los blancos son segundos con siete puntos, a cinco del PSG, y aún no han certificado la clasificación matemática.
La victoria o el empate contra el Brujas serviría para asegurar el billete a octavos de final, aunque el reto blanco es intentar alcanzar la primera plaza, por muy complicado que se antoje.
Cansancio y desgaste extra
El desgaste y la falta de descanso será un problema importante para los blancos. En El Clásico tendrán 29 horas menos de reposo que el Barcelona y pocos días antes tendrá que jugar en Mestalla, un campo siempre complicado para cualquier equipo. Además, los cuatro viajes fuera de casa suponen un importante desgaste para los jugadores.
Los problemas de las lesiones
El mayor temor que hay en el Real Madrid para afrontar esta recta final de año es en el apartado de lesiones. La baja de James Rodríguez con Colombia, incluso antes de jugar con su selección, abrió nuevamente la veda de la enfermería merengue. Un esguince del ligamento interno de la rodilla izquierda que le hará estar tres semanas en el dique seco.
Este capítulo parecía cerrado en Concha Espina, pero la herida se reabierto. Desde pretemporada el equipo ha visto como su rendimiento se mermaba con hasta 26 lesiones en apenas unos meses. Más bajas serían difícilmente asumible para una dinámica que aún tiene a jugadores como Marcelo sin ritmo estable de competición.
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