Casemiro descansó en el partido ante el Valencia del pasado fin de semana para que El Clásico no corriese peligro para él. El mediocentro brasileño llevaba ya algunos encuentros apercibido de sanción y fue en Mestalla cuando le tocó quedarse en el banquillo y así salir desde el inicio contra el Barcelona.
Durante los primeros 45 minutos en el Camp Nou, Casemiro se libró de ver esa quinta amarilla que le hace perderse el siguiente partido. Pero pasada la hora del encuentro vio la cartulina que le hace cumplir ciclo contra el Athletic en la jornada 18 de La Liga, la última de este año.
Hasta ese partido contra los ches, el internacional canarinho lo había jugado todo, salvo unos cambios en el final de algunos encuentros. Todos los duelos como titular y un peso en el equilibrio del Real Madrid que se echó de menos en Valencia, pero que volvió en la Ciudad Condal.
Ahora Zinedine Zidane deberá volver a estudiar cómo rellenar ese gran vacío que deja Casemiro con su ausencia contra el Athletic. Un duelo que se disputa en el Santiago Bernabéu el próximo domingo 22 de diciembre y el cual cierre La Liga hasta el año que viene, el 2020.
Un Clásico para enmarcar
Salvo 'el lunar' de la tarjeta amarilla, propia de un lance del juego y más en su sacrificada posición, el mediocentro brasileño fue uno de los destacados de un Clásico en el que el Real Madrid mereció mucho más y en el que, además, los blancos se vieron gravemente perjudicados por el arbitraje de Hernández Hernández y la actuación, o más bien no actuación, del VAR con los penaltis sobre Varane.
[Más información: Narración y estadísticas de El Clásico entre Barcelona y Real Madrid]