El Real Madrid se marchó al parón de Navidad en uno de los mejores momentos posibles, a pesar de la racha de tres empates en Liga ante Barcelona, Valencia y Athletic Club. Los blancos han mejorado considerablemente en lo que a juego se refiere y en Concha Espina las ilusiones para lo que restan de temporada son máximas. Sin embargo, todavía esperan a Eden Hazard como regalo para el mes de enero.
El belga lleva apartado del equipo más de un mes, concretamente desde el pasado 26 de noviembre, cuando se retiró cojeando del partido ante el PSG en el Santiago Bernabéu. El delantero dejó sin respiración a la parroquia merengue ante sus visibles gestos de dolor, pero lo que parecía una lesión de gravedad, no lo fue tanto.
Al menos tanto como se podía esperar, ya que el ex del Chelsea si iba a estar apartado entre 6 y 8 semanas de baja. Y es que el 5 de diciembre el Real Madrid emitió el parte médico del jugador, en el que se le diganosticaba una microfisura de 3 milímetros en el pie derecho.
Hazard, out
El objetivo del jugador era estar en la Supercopa de España, pero es practicamente imposible que llegue en condiciones óptimas a la cita; sobre todo cuando carece de ritmo de competición y no tendría tiempo para cogerlo.
La recuperación del jugador va por buen camino, pero ni él ni el Real Madrid arriesgarán. Hazard es un pieza clave para Zidane de cara a lo que le vendrá al conjunto blanco en los próximos meses y en Chamartín no quieren ni pensar que el delantero pueda recaer. Y es que de hacerlo tendría muy fácil perderse la temporada. Aún más si cabe cuando la lesión se ha producido en su pie derecho, la única zona en la que ha sufrido lesiones de gravedad. Ejemplo de ello es la que tuvo en su tobillo en la 2016/2017 y que le apartó del Chelsea 80 días.
La nueva Supercopa
Ante esta situación Zidane necesita alternativas en el equipo para aprender a vivir sin el belga. Ya ha quemado etapas en ese proceso, ya que tuvo que afrontar la cuesta de diciembre, ante Barça y Valencia, sin el delantero belga. Ahora deberá hacer lo mismo con la de enero, donde la Supercopa aumentará la exigencia.
La Final Four ante Atlético de Madrid, Valencia y Barcelona será el primer titulo que pueda ganar Zidane en su segunda etapa al frente del Real Madrid. Una forma de inyectar confianza, tranquilidad y liderazgo a la plantilla con vistas a los frenéticos próximos meses que se avecinan.
Jovic, Bale y la samba brasileña
En el ataque del Real Madrid Zidane tendrá que decidir por que opciones opta para los próximos partidos. Luka Jovic es uno de los que más enteros ha ganado en las últimas semanas, ya que la falta de gol que acarrean los blancos le pueden abrir las puertas a las oportunidades; sobre todo cuando en la primera vuelta apenas ha tenido protagonismo.
El serbio podría acompañar a Benzema en la delantera como pareja de baile en un 4-4-2, un sistema que ha dado buen rendimiento a Zidane en sus dos etapas al frente del Real Madrid.
Vinicius Júnior podría ser una alternativa si lo que el francés busca es potencia y desborde, algo que le ha faltado al equipo. Sin embargo, en la derecha lo tiene complicado, ya que Rodrygo está actualmente por delante de él en los planes de 'Zizou'.
Goes ha dado un paso al frente vertiginoso esta temporada y ha firmado actuaciones de renombre con los blancos. Su polivalencia en ataque, pudiendo jugar en el costado diestro como segundo delantero o como extremo, han aumentado sus opciones para la segunda vuelta.
El brasileño competirá de forma muy directa y estrecha con Gareth Bale. El gales es la gran esperanza de Zidane para lo que resta de temporada y si recupera su mejor nivel puede ser un arma de gran potencial para el equipo: domina el juego aéreo, tiene velocidad y es letal de cara a portería. El ex del Tottenham tuvo protagonismo en El Clásico y sin Hazard cotiza al alza.
Isco, un 'clon' de Hazard
La otra opción, que parece ganar enteros en las últimas semanas, es Isco. Espléndido en la banda izquierda o de enganche en la primera vuelta, ha logrado revertir su situación y salir del banquillo para erigirse como titular. El malagueño vive un momento dulce y ha acabado el año con buen sabor de boca como uno de los mejores jugadores del equipo.
A buen nivel de forma, Isco es lo más parecido a Hazard que tiene el Real Madrid. El centrocampista puede jugar por la banda izquierda, internándose hacia dentro, para combinar con Karim Benzema y filtrar balones al resto de delanteros.
El abanico de alternativas de Zidane en el Real Madrid es alargado y tendrá que aprender a vivir sin el belga, al menos, un poco más de lo que podía esperar inicialmente