Nuevamente una jugada en el área del Real Madrid fue objeto de la polémica en el Santiago Bernabéu. Casemiro ya había puesto el 1-0 en el marcador cuando Luuk de Jong firmó el tanto del empate. Un gol que llevó el malestar a las gradas del templo blanco ya que antes hubo mano de Munir.
El canterano del Barcelona, ahora en las filas del Sevilla, tocó el esférico con su mano. Una mano que el colegiado del choque pareció calificar como involuntaria y que desde el VAR, se presume, que se siguió el mismo criterio.
Munir toca el balón con el brazo antes del gol de De Yong
El 'pero' llega cuando se recuerda que en la nueva normativa da lo mismo que una mano sea voluntaria o involuntaria. Precede a un gol de un equipo y por lo tanto debe ser penalizada. Por lo tanto, el gol de De Jong no debió subir al marcador y, como consecuencia, el Real Madrid tendría que haber seguido por delante en el partido. Una mano en ataque que acabe en gol o cree una ocasión de gol es infracción.
Segunda polémica
Si el tanto de Luuk de Jong no debió subir nunca al marcador por esa mano de Munir, el primero que marcó el delantero sí que fue bien anulado por Martínez Munuera después de que Gudelj bloquease a Militao y los bloqueos como estos en fútbol son falta. Finalmente, el Real Madrid consiguió hacer justicia y Casemiro fue el autor del gol de la victoria para los blancos, firmando así un doblete personal.
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