Este jueves se cumple un año desde que el equipo de Santiago Solari cayera eliminado en los octavos de final ante el Ajax. Ese 1-4 que encajó el Real Madrid después de ganar en Ámsterdam por 2-1 fue un duro varapalo después de tres años seguidos ganando la Champions League.
Aquella dura derrota del equipo blanco en el Santiago Bernabéu marcó el punto final del año de transición que se propuso el equipo tras las dos pérdidas que tuvo antes de empezar esa campaña. Con Cristiano Ronaldo fuera y con el adiós de Zinedine Zidane se abría una nueva etapa. Se buscaba un nuevo referente en el banquillo y nuevos héroes sobre el campo. Pero no terminaría en buen puerto.
Pero los de Concha Espina volvieron a la casilla de salida. Con Zidane de vuelta, el equipo ha recuperado las ganas y la ambición por volver a colocar al Real Madrid en el primer escalón futbolístico mundial luchando por todos los títulos. El regreso del entrenador francés, recuperar el vínculo que tiene el galo con ese banquillo, ha supuesto la recuperación de una plantilla que tiene hambre de éxito.
Recuperar el trono
A estas alturas el Real Madrid es el equipo mejor colocado para hacerse con La Liga. Mientras el año pasado se llegaba a ese encuentro frente al Ajax con el campeonato nacional ya perdido, los blancos vencían este pasado fin de semana al Barça en el Santiago Bernabéu cogiendo una ventaja que puede ser definitiva. Los merengues pelearán por el título nacional hasta el final.
Sin embargo, este aniversario ha coincidido con otra decepción en la Copa del Rey. El torneo del KO se le sigue resistiendo a la entidad de Chamartin y a Zidane, que aún no la ha conseguido como entrenador. La eliminación ante la Real Sociedad y ante el público blanco supuso, además de un batacazo, acabar con una racha de 21 partidos sin perder.
Aún así, el gran cambio que ha vivido el equipo es el regreso del fútbol vistoso y de calidad. Los aficionados van al Santiago Bernabéu a ver buen fútbol de nuevo. Tanto es así que el equipo aún no sabe lo que es perder en Liga allí. Zidane ha conseguido volver a crear una estructura muy fuerte en defensa, con un Thibaut Courtois inconmensurable, y con un centro del campo que fue clave en la consecución de la Supercopa de España.
Un tropiezo que no puede repetirse
Pero el equipo también sabe que esa debacle de hace un año se podría repetir con una eliminación en dos semanas en Manchester. El equipo, aunque sigue la misma línea de que el partido siguiente es el más importante, sigue conjurándose para la remontada y darle la puntilla a un Pep Guardiola al que el equipo le sigue teniendo muchas ganas.
El 2-1 que encajó el equipo en Madrid ha complicado mucho su clasificación para los cuartos de final de la Champions. A pesar de adelantarse en el marcador, ocho minutos fatídicos costaron dos goles y poner cuesta arriba la eliminatoria. Esos ocho minutos están fijados en la cabeza de todos los jugadores para motivarse y llegar a la cita para luchar por la remontada desde el minuto uno.
Los de Zidane quieren evadir los fantasmas que existían antes de la llegada de José Mourinho en la máxima competición continental cuando el Real Madrid se pasó siete temporadas sin pasar de octavos de final de la Champions. Este equipo ha demostrado esta temporada que no se parece en nada a esa época negativa. Con la remontada entre ceja y ceja, la plantilla quiere devolver al técnico francés lo que él les ha dado.
[Más información: El gen italiano de Zidane con el que el Real Madrid buscará el doblete]