Nacho Fernández vivió la noche de La Décimotercera su primera final de Champions League sobre el césped siendo protagonista. Tuvo que serlo por culpa de la lesión de Dani Carvajal, pero el canterano hizo un buen partido y estuvo a la altura del equipo que finalmente levantó el tercer título consecutivo. Este martes ha repasado en Real Madrid Televisión el encuentro.

Antes de todo eso, el polivalente defensa ha remarcado la importancia de la figura de Zidane desvelando que hubo una opción para marcharse del Real Madrid, pero que la confianza del técnico galo fue vital para tomar una decisión. "Todos los de su alrededor le queremos. Personalmente hubo una posibilidad de salir del equipo hace años, pero el míster confió en mí. La relación se ha convertido en amistad. Va a muerte con los jugadores y lo que ha hecho en los últimos años es grandioso", explicó el jugador blanco.

Además, ha hecho un alegato de amor hacia el madridismo y ha dejado claro su deseo de seguir en la entidad blanca muchos más años. "Mi pasado ha sido perfecto con esta camiseta. No cambiaría nada. Estoy muy feliz de estar aquí, no lo quiero cambiar por nada y ojalá siga siendo así. Este es el club de mi vida, desde que era pequeño", sentenció Nacho.

El canterano repasó lo que pensó en la previa del encuentro y por qué tenía la sensación de que jugaría. "Había ganado tres Champions, pero nunca había jugado una final. Cuando llegamos a Ucrania tenía el convencimiento de que iba a salir, que me tocaría jugarla. La desgracia es que fue por la lesión de Dani, pero hay que estar siempre preparado. Por mi cabeza ya había pasado el hecho de que podía jugar", explicó el defensa.

La anécdota

También recordó una anécdota de ese 26 de mayo. "Ese día se casaba Héctor, mi mejor amigo. Por mi cabeza pasaba de todo, no iban a venir mis amigos. Solo vinieron mis padres, mi hermano, mi abuela... Al final las supersticiones no valen para nada", desveló Nacho.

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