Hace más de cuatro años que Zidane cogió las riendas del Real Madrid por primera vez. "El entrenador que no fue capaz de ganar a La Roda" terminaría levantando esa temporada su primera Champions League como entrenador jefe. Antes cumplió una etapa en el Castilla donde, en su segunda campaña al mando del filial blanco, estaba completando una buena temporada.
Zidane volverá dentro de justo una semana al campo en el que se estrenó como entrenador profesional. El Real Madrid terminará esta temporada en el Alfredo Di Stefano y será el fortín donde buscará basar su asalto a La Liga. El francés tiene buenos recuerdos de este coliseo donde tiene un balance positivo como entrenador.
El equipo abrirá el reinicio de la temporada ante el Eibar este próximo domingo a las 19:30 horas y allí jugará cinco partidos más hasta el final de La Liga. El club decidió aprovechar el hecho de que no pueda haber público hasta el final de la temporada para agilizar las obras del Santiago Bernabéu. De esta forma acabará la campaña en unas circunstancias especiales y el Alfredo Di Stefano podrá vivir su primera gran cita desde su estreno.
El reencuentro
Zidane ha cosechado en este campo ocho victorias y cinco empates, lo que supone un balance positivo en los 15 encuentros que ha disputado en el feudo situado en la Ciudad Deportiva de Valdebebas. El galo firmó una buena trayectoria en el Castilla aunque su último encuentro fue ese empate contra La Roda que más de uno achacó al francés en el inicio de su trayectoria en el Real Madrid. En esa misma temporada no sufrió ninguna derrota en el estadio blanco.
Bajo su liderazgo crecieron jugadores como Mariano, Martin Odegaard, Marcos Llorente o Álvaro Tejero, que este domingo lo tendrá en frente. El francés se ganó su puesto en el primer equipo con un trabajo memorable en la cantera y con el beneplácito de un vestuario que cambió a base de ejemplo y lo que representa una leyenda de su entidad para una plantilla.
Desde entonces han llegado tres Champions en que convirtieron al Real Madrid en el mejor equipo de la década una vez más. La apuesta por Zidane fue arriesgada, pero el trabajo del francés ha salido reforzado año tras año demostrando que es uno de los mejores técnicos del mundo en la actualidad. El matrimonio con el club es tal que no se entiende un Real Madrid sin él, como ya sucedió la pasada temporada cuando se fue.
Seis finales
Zidane hizo el segundo ensayo en el Alfredo Di Stefano este sábado de forma satisfactoria. El francés dividió a la plantilla en dos equipos para que lleguen en un ritmo de competición más parecido al que tenían antes del parón por el coronavirus. Allí tendrá que disputar más partidos que fuera de casa, por lo que los resultados como local tendrán más trascendencia. Todo ello con la amenaza que se ve en Alemania donde hay más resultados positivos para los equipos visitantes que para los que juegan de local.
El francés quedó muy satisfecho con el rendimiento de sus jugadores. La simulación de partido ha mostrado que todos están en una forma espléndida y que el equipo está preparado para el reinicio de La Liga. Solo Jovic es el único que queda en la enfermería del Real Madrid y el estado físico del resto llega a punto, dentro de lo que se espera en el nivel medio de la competición.
Zidane buscará su éxito particular en el Alfredo Di Stefano en este reencuentro que no esperaba y que supone una segunda oportunidad para asaltar La Liga. El equipo blanco buscará redimirse de esa derrota en el Benito Villamarín que provocó que de nada sirviera el triunfo en El Clásico. El galo volverá a sus orígenes para encontrar la gloria que el madridismo necesita después de un tiempo tan difícil como el que hemos vivido estos últimos tres meses.
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